49 horas para 'colarse' en la final del Notodo Film Fest: así se hizo 'Casi'

VALÈNCIA. El límite eran 49 horas. Y con una historia sencilla, que llegue al público, y sin grandes artificios, es posible. Notodo Film Fest organizó junto al realizador Javier Fesser una yincana de cine confinado durante dos fines de semana de la cuarentena. Se trataba de un concurso de micrometrajes que tenían que producirse en su totalidad en dos días y una hora. David Gaspar y Pau Rodilla, compañeros de profesión (primero en publicidad y ahora en audiovisual) con caminos paralelos decidieron hacerlos secantes para esta ocasión. Y el tiro les ha salido genial. Esta es la historia de Casi.

La yincana proponía tres limitaciones en tres categorías diferentes: un supuesto y un detalle. Ellos eligieron -respectivamente- una visita inesperada, ciencia ficción y que se vean o se escucharan unas maracas. Pero más allá de lo que pudiera resultar más obvio, la historia le dio un vuelco a esos supuestos: la visita en realidad es una llamada, y la ciencia ficción es una especia de viaje a través del tiempo con un teléfono móvil en vez de con una máquina extraordinaria. Casi plantea la historia de Leo, que en principio quiere hacer una llamada de agradecimiento a su madre por un regalo. Al otro lado del teléfono estará él mismo cuando era un niño y el protagonista verá, en ese momento, la ocasión perfecta para enmendar algunos errores de su vida. "La idea surgió de un brainstorming de unas cinco horas que hicimos por videollamada Pau y yo. Decidimos empezar acotando los supuestos para tener la idea más acotada, y a partir de ahí, llegamos a esta idea", explica David Gaspar.

Una vez se pusieron en marcha, y estando en casas diferentes, Gaspar grabó su parte, en la que interpreta al Leo adulto, mientras Pau Rodilla se convirtió en director de su propio hijo para grabar la otra parte de la conversación. Mientras, Carlos Vera, preparaba el jingle sin haber visto una sola toma. Rodilla se encargó del montaje y le envió el corto terminado a Vera el domingo para que hiciera el diseño del sonido y aplicara el jingle dónde viera conveniente. David Sandén se encargó de diseñar un cartel y una portada. "No nos sobró ni un solo minuto del plazo", admite David Gaspar. 

Casi consiguió pasar el corte de los 9 finalistas entre los centenares de propuestas recibidas. La sorpresa llegó este fin de semana, cuando además se proclamaron campeones de una de las dos ediciones que se han celebrado. Javier Fesser calificaba el corto de un "peliculón" y se mostraba muy orgulloso de la elección. Tanto, que tras la gala online en la que anunciaron los ganadores, Fesser les acabo enviando un mensaje en privado felicitándoles la iniciativa.

El premio de esta yincana es el de estar seleccionado directamente para la final del Notodo Film Fest, el certamen de cortometrajes online más importante de España y cantera de algunos de los cineastas e interpretes más mediáticos de la actualidad. El premio de la final suele rondar los 3.000 euros. Gaspar y Rodilla están más que orgullosos con el resultado: "Siempre se puede mejorar en fotografía, pero grabamos con cámaras diferentes, en casas diferentes y en un tiempo muy corto. Realmente creo que lo hemos hecho lo mejor que hemos podido con los medios con los que contábamos". Ahora quieren hacer una versión de tres minutos con la misma historia pero rodando con más medios y dándole más aire al diálogo. Lo hacen para ser más competitivos en la final del Notodo Film Fest, que no tiene las limitaciones con las que ellos han tenido que lidiar.