VALÈNCIA (EP). El conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent, augura una legislatura del Botànic II "más fácil" que la anterior con la entrada de Unides Podem al Gobierno valenciano --junto a PSPV y Compromís--, ya que las decisiones llegarán a Les Corts ya debatidas y "consensuadas" en el seno del Ejecutivo y "ya no tienen por qué tener ningún problema" en el parlamento valenciano.
En la primera edición del Botànic --PSPV y Compromís en el Consell, con el apoyo externo de Podem-- se aprobaron cuatro presupuestos en tiempo y forma. "Los dos partidos en el Gobierno que preparábamos el documento presupuestario y que después en Corts necesitábamos el apoyo de Podem y fue factible", ha recordado.
"Ahora puede ser más fácil porque el debate será en el Ejecutivo", que tiene que tener "capacidad de llegar a acuerdos y consensuar", ha apuntado, pero el documento una vez salga del Ejecutivo ya no tiene por qué tener "ningún problema" porque cuando vaya Corts ya tendrá su visto bueno, ha valorado en una entrevista concedida a Europa Press.
El conseller ha admitido que "habrá debate porque la oposición tiene que hacer sus enmiendas, pero ya tendremos clarísimo que el presupuesto que salga del Ejecutivo se aprobará en el legislativo y por tanto dará continuidad", ha subrayado.
En el día a día, Climent ha señalado que los tres partidos en el Consell tendrán que "demostrar capacidad para llegar a acuerdos y muchas veces, si no hay acuerdo, es más factible dejar el expediente encima de la mesa para que pase un tiempo y se pueda meditar, que no empecinarse, algo que muchas veces a algunos les ocurre", ha apuntado.
A su entender, "el gobierno anterior tuvo esa capacidad de hacer que maduren ciertos expedientes o decisiones y en un momento determinado cuando se madura lanzarlos adelante". De hecho, más de 4.570 acuerdos salieron del Consell y hubo unanimidad, ha remarcado Climent, al tiempo que ha señalado que "si son cuestiones que pueden ayudar a mejorar la vida de la gente, el debate es sano".
El conseller, no obstante asume que existen "dos bloques ya muy claros" en Les Corts, "uno de decisión muy clara de ejecución de gobierno --formado por PSPV, Compromís y Unides Podem-- y otro bloque muy claro que forman PP, Ciudadanos y Vox, sobre todo PP y CS que luchan por ver quién lidera la oposición".
En este sentido, ha señalado que la presidenta del PPCV y síndica de los populares en Les Corts, Isabel Bonig, "parece que no haya cambiado su talante de hace cuatro años a ahora y sigue muchas veces pegando gritos".
En cuanto al portavoz de Cs en Les Corts, Toni Cantó, el conseller de Economía Sostenible considera que "aprende muy bien los discursos, se nota que es actor". "Otra cuestión es si aquello que dice tiene desde mi punto de vista la fuerza y contenido pertinente para hacer una oposición constructiva, porque no entiendo una oposición destructiva o de querer mirarse al ombligo y defender exclusivamente los egos", ha advertido.
Y de Vox "es muy difícil hablar", ha asegurado. Su relato "parece ficticio e inventado y cuando tras 40 años de democracia trabajando por una sociedad inclusiva, igualitaria, que nos está costando Dios y ayuda para construir sociedad de derechos, se escucha a una persona relativamente joven --como la portavoz de la formación en Les Corts, Ana Vega-- con afirmaciones como las que escuché, me sorprende. No podemos ir atrás de ninguna manera. Parecía mirar con carácter retroactivo a los años 60", ha lamentado.
El también exalcalde de Muro de Alcoy (Alicante) ha confesado su "desilusión" con lo sucedido en su localidad natal tras las últimas elecciones municipales, después que el concejal de EUPV, Gabriel Tomás, se haya convertido en primer edil gracias a los votos de PP y Cs, pese a que Compromís fuera la formación más votada.
"Una persona con una ideología clara sabiendo claramente que le ha votado la derecha... yo personalmente hubiera dimitido al segundo y no hubiera aceptado la alcaldía, a no ser que se hubiera hablado antes como parece ser", ha apuntado.
Para Climent, "teniendo claro un proyecto progresista --4 ediles Compromís, 2 PSPV y 2 EUPV-- que podrían trabajar conjuntamente, todavía lo entiendo menos y más si se ha hecho una gestión honesta", tal y como ha defendido que ha hecho Compromís en los 20 años en los que ha estado gobernando en esta localidad. En este sentido ha reivindicado su "gestión honesta basada en el interés general y no particular, no nepotista".
"Yo hubiera entendido esto si hubiera sido al contrario, un cordón sanitario ante la corrupción, la gente que roba, de gente que prima el interés particular ante el general, pero como eso no ha pasado esto es sorprendente y un intento única y exclusivamente de apartar a Compromís, porque es Compromís y porque ha estado gobernando mucho tiempo y no quieren que siga gobernando", ha argumentado.
Para Climent, "plantear una vez eres alcalde un gobierno de concentración --como ha hecho Gabriel Tomás-- como si estuviéramos en un momento de emergencia democrática en el pueblo de Muro todavía se entiende menos porque no hay ninguna emergencia. Estamos en el siglo XXI y la gente ha decidido que unas políticas progresistas se hagan por un grupo de gente progresista y no por los que no sabemos si son izquierda o derecha".
"Y no me valen personalismos --ha remarcado-- porque en todas la familias están los debates y las peleas y las familias nos seguimos queriendo y si uno no tiene capacidad de admitir que en un momento determinado tengo que apartar a alguien de una competencia o no hay un acuerdo en algo y después seguimos trabajando, tendrá que dedicarse a otra cosa pero no a la política y menos en la que hay que dialogar y llegar a acuerdos de manera continuada".
Por eso, "no lo entiendo y no lo entenderé. Tengo que admitirlo porque la democracia es así pero ya está", ha concluido.
Espera que sea la candidata electoral de Compromís en 2023, aunque "hay alternativas"