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Echando un vistazo a Telefónica y sus retos para ganar valor

15/10/2019 - 

MADRID. La 'teleco' por excelencia del Ibex 35 ha sido para muchos inversores uno de los valores principales de su cartera durante mucho tiempo. Unos años donde hemos visto caer el precio de la acción desde los 27 euros por título en el año 2000 -en pleno boom del sector- hasta los actuales casi 7 euros como se aprecia en el siguiente gráfico:


Si bien es cierto que la expansión internacional de Telefónica supuso una interesante recuperación de la cotización hasta el año 2007, desde entonces hemos visto la debacle de la 'teleco' con continuas caídas.

Los principales factores que han afectado a Telefónica desde entonces han sido:

  1. Nueva competencia con menores costes de infraestructura. Recordemos que telefónica mantiene un elevado nivel de costes fijos al contrario que otro tipo de empresas como Jazztel, Yoigo Vodafone...
  2. Una deuda muy elevada -unida a una base elevada de costes fijos- hace que mantenga generalmente un pasivo al que hacer frente de forma recurrente.
  3. Un pago de dividendo elevado y constante, que ha supuesto una salida de caja continúa con la única idea de mantener satisfecho al inversor en vez de obtener una mayor utilidad de ese capital vía reducción de deuda.
  4. Operaciones de expansión internacional que no salieron tan bien como lo esperado como la adquisición de O2 en Reino Unido con el objetivo de vender un paquete completo de telefonía, internet y televisión pero llegando tarde al mercado y no teniendo tanto impacto debido a competidores en el país. Recordemos que Telefónica lleva años intentando deshacerse de O2 de forma desesperada rebajando cada vez más el valor de venta del mismo.

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica
Poniendo un poco en números la situación actual de Telefónica, a lo largo del pasado año la compañía generó aproximadamente -según sus propias cuentas- 3.331 millones de euros de los cuales aproximadamente 2.000 millones salieron de caja en forma de dividendo. Por lo tanto estamos hablando que Telefónica contaba con aproximadamente con 1.000 millones de euros para hacer frente al pago de su deuda, que para 2018 alcanzaba el nivel de 57.418 millones de euros, superior incluso a la capitalización bursátil de la compañía. Estaríamos diciendo que Telefónica tardaría más de 57 años en hacer frente al pago de su deuda en base a esos niveles

Es por ello que el mercado ha entendido que con esos niveles de deuda, beneficio y pago de dividendo, la evolución natural del dividendo es verse reducido durante los próximos años para hacer frente a esa deuda. Esta tendencia natural a la baja del dividendo ha supuesto la salida de muchos inversores provocando incluso mayores caídas en la cotización. Con caída de ventas, beneficios y aumento de las acciones en circulación vía ampliación de capital para financiar operaciones, el BPA o beneficio por acción ha caído de forma consistente durante los últimos años.

Principales riesgos

Entre los principales riesgos de la compañía para el largo plazo se encontraría el incremento de los tipos de interés, puesto que magnifican el tamaño de la deuda y le supondría un mayor pago recurrente de intereses por esa deuda. Realmente la situación actual de los tipos de interés en torno al 0% le supone una financiación barata a telefónica que actualmente paga en torno al 1,8-2% por su deuda.

En cuanto a la tendencia general de la compañía, el objetivo general de Pallete ha sido el de reducción de la deuda vía desinversiones no estratégicas como la venta de activos en latinoamérica, Telxius al grupo Amancio Ortega o la reciente venta de torres de telefonía en las que Telefónica es líder. Su objetivo es la generación de caja para poder continuar con la reducción de deuda con la que ya lleva todo este año en el punto de mira.

A nivel técnico, la situación en el corto plazo es la siguiente:

Como podemos ver la compañía está luchando por recuperar el nivel clave de los 7 euros, nivel que perdió este verano pero consiguió recuperar sesiones después. Con una visión de largo plazo podemos ver que la evolución del precio ha sido completamente bajista, por la situación intrínseca y por el continuo sangrado de dividendos e intereses de deuda.

Si bien varios analistas la sitúan en 7,5-8 euros para final de año es bastante posible que una mala evolución de los mercados en esta recta final suponga un bache para la 'teleco' y le haga perder los 7 euros por acción.

Ignacio Serrats es analista de XTB

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