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El BCE esperará nuevas evidencias

Analistas, operadores, gestores e inversores estarán pendientes hoy del primer mensaje del año de Mario Draghi para calibrar cuándo subirán los tipos de interés en la Eurozona por primera vez desde 2011

24/01/2019 - 

MADRID. En su última reunión de diciembre el Banco Central Europeo (BCE) estuvo más cauteloso, reduciendo sus previsiones de crecimiento aunque no mostrando ningún indicio de pánico respecto a la pérdida del impulso económico en la Eurozona. Consideraba los riesgos "ampliamente equilibrados" pero al alza. Desde entonces los datos de índices manufactureros PMI y encuestas nacionales de producción industrial se han deteriorado más, en particular en Francia y Alemania. 

Los riesgos se han desplazado claramente al alza pero el BCE puede abstenerse de admitirlo y sin embargo enfatizar que algunos factores discontinuos proporcionan una imagen excesivamente oscura de la situación cíclica actual. Así que aunque el BCE vaya a reconocer el deterioro de los datos probablemente espere a que haya más pruebas antes de hacer cambios significativos en su comunicación. En cualquier caso el deterioro de los datos hace la comunicación más complicada para el BCE.

El caso es que habiendo terminado con las compras netas de activos el foco de atención se ha ido desplazado a los tipos de interés.  Al respecto consideramos un primer aumento el segundo semestre de 2019, aunque los datos recientes constituyen vez más un desafío al respecto y cabe la posibilidad de que no haya subida alguna en 2019.  


En su última acta mencionaba que "tanto el período de tiempo antes de un primer aumento de tipos de interés como el horizonte de reinversión han aumentado ante los datos recientes más débiles de lo esperado". Entonces el BCE estaba claramente satisfecho con las expectativas del mercado respecto a un primer aumento de tipos de interés incluso para 2020 y es probable que respalde de nuevo estas expectativas del mercado. 

De manera que estimamos que el BCE mantenga sus previsiones sin cambios, con una indicación de que los tipos de interés probablemente permanezcan en el nivel actual "al menos durante el verano de 2019", señalando que pospone cualquier reformulación monetaria hasta las próximas previsiones del 7 de marzo.

Pendiente de la inflación

Ahora bien probablemente el factor determinante para el comienzo y el ritmo de normalización de los tipos de interés sea la evolución de la inflación central (sin alimentos ni energía). En concreto, los datos de inflación de los primeros meses de este año determinarán si el primer aumento llega el segundo semestre. El BCE, aunque anteriormente revisó a la baja la previsión de inflación central, parece seguro de poder cumplir el objetivo del 2%, especialmente ante la evolución del mercado laboral, por lo que esta ocasión es poco probable que cambie el discurso sobre inflación.

Finalmente Draghi probablemente volverá a decir que se ha debatido la extensión del mecanismo de liquidez para los bancos, pero consideramos que una decisión sobre TLTRO (operaciones de refinanciación condicionadas a concesión de crédito) llegará en una etapa posterior.

Nadia Gharbi es economista de Pictet WM

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