Fotos: Carme Ripollès
VILA-REAL. Villarreal y Elche empataron sin goles en La Cerámica en un encuentro muy intenso, pero de pocas ocasiones, en el que el conjunto neutralizó a los locales, que salvo en alguna acción aislada en la segunda mitad (especialmente un disparo de Take Kubo dentro del área) no llegó a inquietar a Edgar Badía.
Ante un Villarreal que encaraba la cita con nada menos que Manu Trigueros, Vicente Iborra y Parejo en la zona ancha y Samu Chukwueze y Álex Baena acompañando a Gerard Moreno en la vanguardia, Almirón optaba por mantener la defensa de cuatro, situar a Raúl 'Guti' junto a Marcone en la sala de máquinas, con Josan y Fidel en los costados y a 'Tete' Morente tras Pere Milla en punta. Un 4-2-3-1 que por momentos se convertía en un 6-3-1, una suerte de tela de araña de la que los atacantes locales no lograron zafarse en ningún momento y es que los hombres de Unai Emery se hartaron de tener el balón y moverlo de un lado a otro en campo rival pero sin llegar a gozar de ocasiones de peligro en el primer tiempo, más allá de una falta botada por Estupiñán en el arranque.
Aunque el preparador de Fuenterrabía aprovechó el paso por vestuarios para darle otro aire a su ataque con la entrada de Take Kubo y Paco Alcácer, pero siguió sin encontrar la manera de meterle mano al equipo franjiverde, que siguió mostrándose como un bloque sólido, ordenado atrás con dos líneas muy bien definidas (que además no renunciaba a salir tocado desde atrás) y muy solidario (Pere Milla fue de los que más kilómetros corrió, aunque casi siempre fuera detrás del esférico).
Solo a partir del minuto 70, con sendos disparos de Gerard Moreno (que se perdía rozando el palo largo de la meta franjiverde) y el japonés Kubo (que se topaba con un acertado Badía) y un remate de cabeza de Pau Torres que golpeaba (por arriba) en el travesaño, el Villarreal dio alguna sensación de poder llevarse los tres puntos, pero en contra de lo que cabía pensar, al Elche el partido no se le hizo largo.
Los cambios habían dado una cierta vitalidad al Villarreal, pero el partido seguía denso, sin llegadas a puerta por parte de ningún equipo y con el Elche más cómodo que su oponente a pesar de que se jugaba algo más cerca de su meta que en el primer tiempo.
Poco a poco el dominio del conjunto castellonense se intensificó, por lo que el Elche le tocó defenderse con menos fútbol y más intensidad. Así, Pau Torres remató con timidez de cabeza al larguero, pero el Villarreal no hizo méritos suficientes para ganar ante un rival que sí mereció la igualada.
0 - Villarreal CF: Sergio Asenjo, Mario Gaspar, Raúl Albiol, Pau Torres, Parejo, Gerard Moreno, Vicente Iborra (Francis Coquelin, min. 77), Chukwueze (Paco Alcácer, min. 45; Yéremi Pino, min. 77), Manu Trigueros (Fer Niño, min. 81), Estupiñán y Álex Baena (Kubo, min. 45).
0 - Elche CF: Edgar Badía, Diego González, Iván Marcone, Gonzalo Verdú, Pere Milla, 'Tete' Morente (Mfulu, min. 86), Raúl 'Guti', Fidel, Josan (Jeison Lucumí, min. 86), Antonio Barragán y Josema.
Arbitraje: el oscense Santiago Jaime Latre mostró amarillas a Parejo, Raúl Albiol y Francis Coquelin por el Villarreal y a Pere Milla y Fidel por el Elche. Además amonestó con una cartulina amarilla a Jorge Almirón, el técnico franjiverde.
Incidencias: partido de la duodécima jornada en Primera División disputado a puerta cerrada en el estadio La Cerámica de Villarreal, en una tarde-noche fría en la que los jugadores del Elche lucieron un brazalete negro en recuerdo de Vicente Iborra, que fuera futbolista franjiverde durante 11 campañas en la máxima categoría y que fallecía días atrás.
