Benidorm. Foto: PEPE OLIVARES.BENIDORM. El peor escenario para que el Imserso sufra retrasos esta temporada ya se ha dado. Mundosenior ha recurrido la adjudicación del lote de la Costa, que ha tenido en los últimos cuatro años y del que se ha quedado fuera por lo que creen que son errores subsanables. Es este motivo precisamente el que le ha llevado a presentar este recurso ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, el último día.
Mundosenior, formada por Globalia y Barceló, había prestado en los últimos años precisamente el servicio del lote del que se le ha excluido. Pero en esta ocasión la beneficiaria de la Costa había sido Mundiplan, formada por Iberia, Alsa e IAG7, que es la que había hecho hasta ahora Interior e Islas, que es el lote que se ha adjudicado Mundosenior.
Por tanto, las dos grandes marcas se habían repartido la tarta, pero al revés de como había sido en los últimos cuatro años, cuando se hizo el último procedimiento de contratación. Desde el dos de agosto que se da a conocer la propuesta de los técnicos sobre los lotes, las empresas habrían tratado de llegar a un acuerdo para no cruzar el límite del recurso. Más que nada porque este escenario hacía difícil que el programa social para mayores se comercializara a tiempo.
Sin embargo, el límite se ha cruzado. Justo el día que acababa el plazo para Mundosenior por haber sido excluida. De esta manera, se cubría las espaldas, ya que Mundiplan tiene hasta el 13 de septiembre para hacer lo propio con los otros lotes. "Ha habido un problema en general con el hecho de que si ahora no recurriamos existía una situación de indefensión", confirmaron fuentes conocedoras de las operaciones.
Los tiempos ya eran ajustados sin ningún tipo de alegación a la propuesta de adjudicación, pero su recurso aleja la formalización del contrato y que se pueda comercializar el 15 de septiembre: día marcado en la agenda del sector para dar pistoletazo de salida. Día clave también para otras dos partes afectadas, los trabajadores de los que depende su empleo en invierno de este programa para mayores, así como los propios jubilados, que no saben cuándo podrán irse de vacaciones.
Los hoteleros tienen muy reciente lo ocurrido hace apenas cuatro años, cuando la venta se retrasó dos meses, así como la llegada de los visitantes, que en lugar de la segunda quincena de octubre, empezaron sus viajes en diciembre. Un panorama que cerró muchos hoteles de las zonas más afectadas, entre las que se encuentra Benidorm, siendo esta ciudad una de las que más turistas senior absorbe a través del Imserso.
Por tanto, ahora las dudas entran en los empresarios, que se plantean aguantar o no la temporada de invierno, con la incertidumbre de los plazos.
Ante esta situación que se podía dar y que gran parte lo esperaba, la propia Ministra de Turismo, Reyes Maroto, dijo en su momento que tenían un plan B que tratarían de desplegar en caso de que hubiera peligro de retrasarse la venta. Hay que tener en cuenta además que aún habría tiempo para un posible acuerdo entre las dos marcas, y retirar así el recurso interpuesto por Mundosenior.
Con todo, los hoteleros están "muy preocupados por el devenir" que podría tener el recurso presentado por Mundosenior, según indicó a Europa Press el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, Juan Molas.
Las condiciones que ofrecía el pliego que se aprobó para estos dos años (con prórroga para otros dos más) no gusta a los hoteleros que se tienen que ajustar a los criterios que reclaman para poder acoger a estos turistas. Como ha ido contando este diario, critican que no se haya realizado un estudio real de costes hoteleros y "trabajan con cifras inventadas, con aparentes contradicciones y sin base económica alguna", como ha denunciado en varias ocasiones la patronal hotelera de la Comunitat Valenciana, Hosbec.
Al mismo tiempo, dicen que los pliegos no tienen en cuenta ni se pronuncian sobre los convenios colectivos laborales de hostelería aplicables y sus condiciones económicas que afectan a los 12.000 trabajadores vinculados al programa.
Otra de las reclamaciones que hacen es que valoran "de forma excesiva" la oferta hotelera de 4 estrellas sobre otras ofertas menores "sin ningún tipo de justificación o base". De este modo, se podrían excluir otros establecimientos, y se perjudica al sector si se tiene en cuenta que los de tres estrellas han sido los que han absorbido este programa en gran parte durante los últimos años.
