CASTELLÓ. El Partido Popular de Castellón ha exigido al presidente de la Diputación Provincial, en calidad de propietario del 50 por ciento del Hospital Provincial, la "reparación urgente e inmediata de las goteras que afectan e inutilizan a la sala de tratamientos oncológicos del centro hospitalario".
La demanda la ha formulado la diputada Nieves Martínez, quien este martes, en el pleno ordinario, mostró el estado en el que se encuentra esta ala del Hospital Provincial. "El PSOE no puede ponerse nuevamente de perfil con este tema", ha señalado la diputada provincial. "Es urgente que quienes están al frente de la gestión de este centro referente en nuestra provincia empiecen a gestionar en aras de proteger a los pacientes y a los profesionales sanitarios en lugar de hacerlo en favor de Ximo Puig y sus siglas", ha dicho.
En este sentido, ha asegurado la responsable de Sanidad del PP en la Diputación Provincial que desde el PP van a seguir ejerciendo de "altavoz" de los ciudadanos y de los médicos, "esos a los que el PSOE otorga la Alta Distinción de la Provincia en público y despide, a razón de 563 profesionales, en privado".
Y para ello, ha subrayado que van a seguir reclamando la conservación del CICU, "que desean desmantelar", la protección del Hospital Provincial, "que desean reducir a un centro de salud"; la inversión en recursos "que blinden los institutos de Oncología, Oftalmología y Psiquiatría", así como la apertura de los consultorios de verano "que el PSOE anunció el 18 de junio y que hoy siguen cerrados".
Para la diputada provincial, "es escandaloso que el PSOE dé la espalda a la sanidad, pero todavía lo es más que Compromís asuma la falta de planificación y la información falsa a la ciudadanía como algo normalizado".
En este sentido, Martínez ha señalado que las familias de Castellón no merecen que en plena pandemia, "con los contagios disparados por el mensaje de una ministra de Sanidad que anunció el adiós a las mascarillas para dar la bienvenida a las sonrisas", haya recursos sanitarios que son vitales cerrados, "porque el castigo es doble, no solo para los pacientes, sino también para unos sanitarios que merecen toda la protección porque son sus manos las que salvan vidas".