Los concejales del PP, en una imagen de archivo. Foto: Antonio PradasCASTELLÓ. El Partido Popular hace de la peatonalización de la avenida Lledó un nuevo frente político para desgastar al Acord de Fadrell. La estrategia sigue la línea de fiscalización marcada en otros temas polémicos que protagonizan la actualidad política municipal, como las fiestas, las tascas o la comisión de investigación de la sala de Seguridad.
Sin embargo, la actuación en la travesía, desde la plaza María Agustina hasta la Basílica de Lledó, no es nueva. Ni siquiera se la puede atribuir el tripartito como idea propia. Según explican fuentes municipales, el proyecto se incluyó por primera vez en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), dentro del periodo 2007-2015, época en la que la derecha gobernaba en el Ayuntamiento de Castelló.
Como establece la normativa, la renovación de la avenida "fue participada y en aquel momento no se presentaron alegaciones", agregan las mismas fuentes. Tampoco las hubo en 2016, cuando se volvió a incorporar la propuesta con motivo de la ampliación del plan. Se expuso al público y no hubo objeciones "vecinales ni de grupos políticos", prosiguen desde el equipo de gobierno.
En este punto, el consistorio reitera que la peatonalización simplemente se proyecta a través de una memoria descriptiva y que ha permitido presentar una solicitud para aspirar a fondos europeos. Se trata de un documento preceptivo y modificable para optar a la financiación en el que se esbozan las líneas de actuación.
"La intervención que se propone quiere contar, pese a todo, con la opinión de los vecinos y vecinas porque es un proyecto de ciudad. Por eso, el equipo de gobierno ha decidido abrir un proceso participativo para explicar la actuación y escuchar las propuestas vecinales. Este debate contará con asesoramiento técnico para aclarar las dudas que se puedan suscitar", puntualizan las citadas fuentes.
Desde el Fadrell se señala que "queremos un debate sereno y productivo, y nos parece lamentable la campaña de desinformación alentada desde el Partido Popular, que intenta utilizar a los vecinos y vecinas con fines partidistas, oponiéndose además a la llegada de fondos europeos para mejoras en la ciudad y a actuaciones de reducción de emisiones contaminantes".
"Una vez más, estamos ante un intento del PP de desinformar y generar crispación contra el Gobierno municipal en torno a una actuación urbana que, recordamos, ya se contemplaba en el PMUS de 2007", concluyen desde el equipo de gobierno.
La remodelación de la avenida Lledó, con un presupuesto de 3,5 millones de euros, implica eliminar el carril de entrada, así como los estacionamientos en línea que se localizan a ambos lados de la vía. A cambio, se ejecuta una plataforma peatonal y ciclista en la parte central de la calle.
A partir de la rotonda de Tombatossals hasta la basílica, la memoria descriptiva contempla la ampliación del paseo central y la construcción de un carril bici, sin afectar a los actuales sentidos de circulación para vehículos. De hecho, para ganar espacio lo que se propone es suprimir las zonas de aparcamiento.
