VILA-REAL (EFE). El Villarreal afronta por octava vez en su historia los cuartos de final de la una competición europea, seis de ellos en la Liga Europa y dos en la de Campeones, con el objetivo de ser capaz de aprovechar el Efecto Emery, ya que su entrenador es un especialista en la segunda competición continental, en la que acumula tres títulos.
El reto para el equipo que dirige Unai Emery es llegar por primera vez en su historia a una final europea, para lo que necesita superar al Dinamo de Zagreb en cuartos de final y posteriormente en semifinales al ganador de la eliminatoria Arsenal-Slavia de Praga.
Hasta el momento, el equipo castellonense ha llegado en cuatro ocasiones a una semifinal continental, pero nunca la superó al perder contra el Valencia (2004), Arsenal (2006 en la Liga de Campeones), Oporto (2011) y Liverpool (2016).
Tras todas estas decepciones, el Villarreal vuelve a tener su sueño a tiro con el factor favorable de contar con el técnico más laureado de la Liga Europa, ya que Emery ha ganado tres veces el torneo con el Sevilla y perdió una final con el Arsenal.
Estos registros le convierten en el entrenador que mejor conoce el camino para levantar un título como este, ya que nadie lo ha ganado tantas veces como él.
A ello, se suma la experiencia del Villarreal, ya que es el equipo que más partidos y eliminatorias de esta competición ha disputado.
Hasta el momento el tándem Emery-Villarreal ha funcionado a la perfección en Europa. Los amarillos firmaron una fase de grupos inmaculada con cinco victorias y un empate, aunque uno de sus triunfos lo obtuvo, ante el Qarabag de Azerbaiyán, en los despachos pero cuando el Villarreal ya tenía asegurada su clasificación.
El equipo fue superior no solo al conjunto azerí, sino también al Maccabi Tel Aviv israelí y al Sivasspor turco, para posteriormente dejar en la cuenta al Red Bull Salzburgo austríaco, al que ganó en los dos partidos de dieciseisavos de final.
El último rival superado ha sido el Dinamo de Kiev ucraniano, también con sendas victorias en los dos choques de octavos de final.
El Villarreal es de los pocos que llega a esta recta final de la temporada con tan buenos números, lo que alimenta el optimismo, ya que incluso cuando el equipo sumó una racha de ocho partidos de Liga sin ganar, nunca le faltaron los triunfos en Europa, lo que le permitió reactivarse en los momentos de crisis.