Diversificación, posibilidad de invertir a plazos cortos y la no correlación con la mayoría de activos financieros convencionales son los tres factores clave
VALÈNCIA. La semana pasada el Banco de España su Boletín Económico Trimestral, una de las publicaciones más esperadas en el mundillo económico, y que contiene la evolución de los principales indicadores de nuestra economía y el pronóstico que de los mismos hace esta institución.
Resumiendo sus principales mensajes:
La situación no es positiva, la pandemia lo condiciona todo y ésta (inexplicablemente) no evoluciona como todos esperábamos cuando en junio creíamos superado el pico de la enfermedad.
Pero el inversor, y también quien se considera sólo ahorrador, tiene que enfrentarse a esa realidad y tomar decisiones sobre lo que hacer con su ahorro. Puede dejar sus ahorros en el banco, pero ello comporta costes, en forma de comisiones, tipos de intereses a pagar en los depósitos de empresas, pérdida por inflación... y coste de oportunidad frente a hacer otras cosas que permitan obtener una rentabilidad.
Si repasamos las opciones más habituales, el panorama no es alentador para el inversor:
¿Hay alternativas?
Creemos que el crowdlending y los préstamos a empresas son una alternativa muy razonable para esta situación. Pero antes es necesario realizar una excelente selección de empresas a las que financiar. Lamentablemente, esta crisis va a suponer el cierre de un buen número de ellas, y es preciso asegurar la calidad del activo donde invertir. No es lo mismo invertir en un préstamo a una compañía que ha seguido trabajando, facturando y cobrando con normalidad estos meses, que hacerlo en otra que ha visto, lamentablemente, interrumpida su actividad por la pandemia, y tenga su futuro comprometido.
En nuestra opinión hay tres factores que hacen que el crowdlending y los préstamos a empresas sean una alternativa de inversión muy interesante:
Son algunas las ventajas de las inversiones alternativas, en las que cada vez más personas destinan una parte de su patrimonio, contrapesando riesgos. A estas 'básicas', cabría añadirle una subjetiva, que cada vez más inversores valoramos: saber que las inversiones que realizamos tienen un impacto directo en la recuperación económica, ayudando al desarrollo de las pymes que son las que crean empleo en este país.
No todo va a ser fiarse de las recomendaciones de terceros. El inversor también interviene en el proceso. Y si el inversor tiene dudas respecto a la solvencia del proyecto, por encima (y con independencia) de la selección que desde Colectual realizamos de los proyectos, debe hacer la 'prueba del nueve', y responderse a una pregunta sencilla: La empresa en cuyo proyecto queremos invertir ¿Cómo ha sido afectada en sus ventas desde el mes de marzo?
En toda crisis hay perdedores y ganadores, y la pandemia también ha servido para que numerosas empresas mejoren sus cifras al cobrar sus productos y servicios un nuevo valor en la sociedad post Covid-19. Así, empresas dedicadas a la alimentación, la logística, la salud, la investigación, la seguridad... se enfrentan a una situación más proclive a su actividad, mientras que hay claramente sectores perjudicados, como el turismo, ocio o viajes, cuyo horizonte de recuperación es hoy una incógnita.
Finalmente, hay un factor que una parte de los inversores también aprecian, que es participar de forma directa en la recuperación de la economía y la adaptación de la sociedad a la nueva realidad: la sociedad post Covid-19. Cada vez más se amplía el consenso entre economistas, sociólogos, periodistas... respecto al brutal impacto que la pandemia va a tener en la sociedad como la conocemos hoy, que se puede resumir en la frase "ya nada volverá a ser igual".
Ni el trabajo, ni el colegio, ni ir al médico, ni las reuniones, ni ir a comprar o al teatro, parece que vayan a volver en algún momento futuro a ser como lo eran hasta hace poco. La caída en la economía está siendo la mayor desde que hay registros, incluyendo períodos de guerra. La huella en la sociedad será profunda y habrá que adaptarse en las actividades que señalábamos antes, y también en la forma de invertir los ahorros.
De cómo será la inversión en la sociedad post Covid-19 hablaremos en post futuros. De momento querríamos señalar que como ciudadanos y como inversores tenemos que tomar las mejores decisiones para nuestra economía, tanto colectiva como individual, y el crowdlending de pymes es una buena opción para ello.
Pedro Gómez es cofundador y presidente de Colectual