Cuatro años no son nada, o pueden serlo todo. En el caso del PSOE los últimos cuatro años lo han sido todo, han supuesto la renovación y consolidación de un sólido proyecto de izquierdas, que puede aspirar tras el 40 Congreso a seguir sumando y creciendo. Los próximos cuatro años serán determinantes y, como en 2017, todo dependerá del trabajo que realicemos durante los periodos congresuales.
Cuatro años han pasado ya desde aquella mañana de inmensa ilusión por reconquistar la esencia de un proyecto político de izquierdas, por lograr la ansiada reconexión social, por impulsar de forma real la participación de la militancia. Esperanza y alegría.
Es lo que recuerdo de aquel 26 de marzo de 2017 en el que más de 3.000 militantes y simpatizantes socialistas llenamos el pabellón municipal de Burjassot para apoyar al hoy Secretario General del PSOE y Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Miles de compañeros y compañeras que, contra todos los aparatos del partido, decidieron dar un paso al frente para reivindicar ser parte activa en nuestra organización, reclamar nuestro derecho a decidir sobre el futuro del PSOE y apostar por una vuelta a un partido de izquierdas.
En aquel momento hubo compañeros y compañeras que no quisieron ver que lo que se estaba gestando. Pero aquel domingo de marzo fue un gran día para quienes pudimos vivirlo. Un día que recuerdo con orgullo porque tuve el enorme privilegio de ser parte activa en la organización de aquel histórico momento. Histórico, sí. Histórico porque la militancia socialista valenciana dejó claro en aquel pabellón que el apoyo al proyecto de cambio del PSOE sería mayoritario en la Comunitat. Y así lo constató el resultado de las primarias: el 63% de la militancia socialista de la Comunitat respaldó el proyecto de Pedro Sánchez. Contra todo, y contra todos.
El hoy Presidente del Gobierno defendió aquel día en Burjassot que las primarias debían ser “el kilómetro cero de la regeneración que necesita España”. Y vaya si lo han sido: una moción de censura a las entrañas corruptas del PP, incontestables victorias electorales del PSOE, nueve presidencias autonómicas, miles de gobiernos locales en toda España. Miles de oportunidades de mejorar la vida de la gente a diario.
Cuatro años después de aquella ‘profética’ sentencia, tenemos la ocasión de seguir construyendo el futuro socialista desde la Comunitat. Hace solo unos días el Secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, anunciaba que València será la sede del 40 Congreso Federal. Un hito que supone el reconocimiento para la militancia valenciana que contribuyó de forma determinante a la victoria de Pedro Sánchez en las primarias de 2017.
Un reconocimiento y una oportunidad para el futuro del socialismo valenciano. La oportunidad de convertir el 40 Congreso Federal en el revulsivo que necesita nuestra federación para recuperar la olvidada vida orgánica.
Feminismo, Inclusión Social, Transición Ecológica, Economía y Empleo, Nuevos Derechos, España Municipal, Memoria Democrática o España Autonómica son algunas de las áreas que integrarán la Ponencia Marco del 40 Congreso Federal del PSOE. Un documento que nos permitirá afrontar el camino hacia el PSOE del futuro, afrontar los retos de nuestra sociedad.
Y si fundamental será el 40 Congreso del PSOE, no menos trascendental será el 14 Congreso Nacional del PSPV. Es necesario para nuestro futuro como organización, para seguir siendo una verdadera herramienta de cambio social, que esta vez seamos capaces de desarrollar un congreso en el que prime el debate sosegado sobre la tentación de un ‘congreso exprés’. Debemos ser capaces de implicar a toda la organización en el proyecto político del PSPV porque lo que está en juego es nuestro futuro. Y lo está si somos conscientes del profundo impacto que puede tener en el tablero político valenciano el incierto destino de los 466.000 votos que cosechó Ciudadanos en 2019.
Todas y todos debemos ser capaces de impulsar un Congreso Nacional alejado de relatos plebiscitarios sobre la gestión institucional. Ese momento llegará en 2023. Y no podemos cometer el error de llegar a esa cita con un proyecto político anclado en los logros pasados pero carente de respuestas para los retos futuros de la Comunitat. Es el momento de definir un proyecto alejado del cesarismo y apegado a la realidad de la Comunitat.
Es el momento de ‘recuperar’ al partido porque sin él no habrá victoria electoral posible, sin el activismo de la militancia no habrá conexión real con la sociedad, ni posibilidad de configurar un proyecto ampliamente mayoritario - y con garantías de formar gobierno- en 2023. El 14 Congreso Nacional del PSPV será nuestra oportunidad como socialistas de configurar un proyecto que sume internamente para redoblar nuestro apoyo socialmente.