CASTELLÓ (EFE). Unai Emery vive por y para el Villarreal. Disfruta de vacaciones activas y del sosiego que da su título en la Liga Europa. Juega a las cartas con sus amigos, pasea por el monte en Fuenterrabía, su tierra natal. Y a partir del lunes, pendiente de Pau Torres y Gerard Moreno, sus internacionales con España.
En una amplia entrevista con la Agencia Efe, Emery se confiesa "un autodidacta", disecciona la fortaleza de la dupla de centrales Pau-Albiol, "la pareja perfecta" y pondera a Luis Enrique, claramente, según él, "el mejor seleccionador posible".
-¿Qué opciones le ve a la selección española para la Eurocopa?
-Yo creo que tenemos el mejor seleccionador posible. Luis Enrique tiene mucha personalidad, mentalidad y lo está demostrando, le va a sacar el mejor jugo a la selección. A mí me gusta como juega el equipo y me gusta como trabaja el seleccionador.
España siempre es candidata, quizás el favorito sea Francia o Alemania, pero España siempre está ahí. Creo que el toque personal de Luis Enrique puede ser diferencial para que España pueda hacer algo grande.
-Pensando ya en la próxima temporada en el Villarreal, en el apartado de fichajes, ¿Qué nuevas incorporaciones plantea hacer el club de cara a la próxima campaña?
-Estamos en un contexto mundial difícil, las consecuencias para todas las ligas y clubes van a estar todavía en un espacio de tiempo. Tenemos la suerte y la tranquilidad de que el Villarreal tiene un proyecto estable y el club, con el horizonte de la Champions en la próxima temporada, quiere dar un paso hacia delante. Para ello hablamos de hacer entre cuatro o cinco incorporaciones, además de algunas salidas, para asegurar estar entre los seis primeros de liga y disputar los puestos Champions.
-Pau Torres ha sido uno de los grandes protagonistas de este Villarreal y se presume como uno de los principales baluartes de España para los próximos años. ¿Cómo valora su progresión? y ¿Cuáles destacaría como sus principales atributos?
-El Villarreal ha demostrado tener una credibilidad en cuanto a jugadores de cantera consolidados en el primer equipo. Aquí se cuida mucho al futbolista joven.
Pau ha crecido ayudado también por la veteranía de Albiol. Han formado una pareja perfecta. Pau ahora mismo es un jugador muy consagrado, le ilusiona muchísimo representar al Villarreal en la Champions, para él es un orgullo.
Este tipo de jugadores atraen muchas miradas, si en un momento dado llegara la llamada de un club de la dimensión del Barcelona, del Madrid o del Chelsea, el Villarreal, siendo un club grande, siempre deja la puerta abierta.
Pau no va a dar ese paso ahora y nosotros queremos que se quede para la próxima temporada, pero lógicamente el Villarreal, siempre que se genere un beneficio para el club y el futbolista, nunca impide que sus jugadores, en un proceso natural, progresen en su carrera a nivel económico y deportivo.
Luego, de su juego destacaría que es un jugador tácticamente muy equilibrado, con una capacidad de construcción tremenda. Tiene mucha facilidad para encontrar las primeras vías de pase desde atrás en corto, largo..., es rápido, fuerte y muy inteligente. Tiene todas las cualidades para estar entre los cinco mejores centrales del momento.
-¿En qué posición se encuentra más cómodo Gerard Moreno?
-Él se siente más cómodo acompañado de un jugador más, que juegue algo más adelantado que él, eso le da más seguridad. Sin embargo, Gerard tiene que ser capaz de dar el paso de encontrarse su entorno siendo el único referente en ataque. Es un hombre gol, seguro que su rendimiento en la Eurocopa será bueno.
-¿Qué matices incorporó a su libreto de entrenador en su periplo por Inglaterra y Francia?
-Yo he sido muy autodidacta. He ido recogiendo mis análisis, analizado entrenamientos de otros equipos y otros entrenadores, en muchas ocasiones vía Youtube. El trabajo en cada club ha sido prácticamente el mismo, estudiar al rival, a los entrenadores, cómo se juega en cada liga...
Lo que sí aprendí es que el idioma es lo que te condiciona para poder transmitir tu idea a los jugadores. Tácticamente sí hay ciertos matices en cada liga que tienen más marcados, pero el fútbol es el mismo en todos sitios. Es cuestión de adaptarse, conocer las nuevas ideas que se van incorporando, etc. Todo eso es trabajo, tiempo de estudio y eso es aplicable a todos los países.
-Este año en las filas del Villarreal han sobresalido varios jugadores del filial como Yeremi Pino y Fernando Niño, convocados con la selección española sub-21, ¿Cómo se consigue crear un entorno favorable para el crecimiento del futbolista en un equipo de primer nivel?
-Lo primero, combinando veteranía y juventud. Los más veteranos ayudan a crecer a los más jóvenes, un ejemplo claro es el de Albiol con Pau, pero también el de Bacca con Fernando Niño. Luego, en el Villarreal hay un trabajo muy bueno en categorías inferiores y para darle continuidad hace falta una estrategia.
A veces se apuesta por subirlos directamente al primer equipo para ir adaptándose al nivel de exigencia y para que el jugador vaya encontrando su momento de competir. Otra opción es cederlos para que en otro club encuentren otras experiencias que les ayude a llegar más consolidados a nuestro equipo.
Álex Baena, siendo el canterano que menos partidos ha jugado, disputó entre 18 y 20 encuentros, Fernando Niño entre 24 y 26 y Yeremi Pino entre 30 y 35. Son números muy bonitos. Si hubieran salido cedidos, ¿habrían llegado a contar con tantos minutos? Quizás no y eso es lo que gana el jugador y el Villarreal.
-¿Cómo vivió la tanda de penaltis en la final de la Liga de Europa?
-Llegué a la conclusión de que al que le miro a los ojos y me quita la mirada no quiere lanzar y viceversa. Al final en el contexto de una final, la presión, el miedo a fallar es lo que más pesa, manejar esas dudas es algo que no se entrena.