BENIDORM, (EP). La Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) estima que los niveles de PIB turístico e ingresos por turismo extranjero del año 2020 serán equivalentes a los de hace 25 años, con una caída de la actividad turística de 106.159 millones de euros. En el caso de la Comunitat Valenciana, prevé una caída de la actividad turística del 67,2 por ciento en este año.
De esta forma, la actividad directa e indirecta del sector turístico en 2020 en España sería de 46.431 millones de euros, equivalentes a los niveles del año 1995.
El vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, ha explicado este miércoles que en esta comparativa, además, habría que tener en cuenta que la oferta y capacidad del sector turístico español era menor, por lo que el impacto de esta caída "es muchísimo más dolorosa y más grave".
Estas pérdida estimada de la actividad, que aumentan en 7.500 millones de euros las previsiones realizadas por Exceltur en agosto, suponen una caída del 69,1% con respecto a 2019.
La caída de la actividad turística para el conjunto de 2020 se concentra en Baleares (-82,6%), Cataluña (-74,8%), la Comunidad de Madrid (-72%), la Comunitat Valenciana (-67,2%), Andalucía (-66,2%), Canarias (-65,8%) y el resto de las comunidades autónomas (-62,5%).
Exceltur considera que esta realidad "supone un problema que trasciende a la realidad turística y que afecta a elementos estructurales del sistema económico español en los que el turismo juega un papal "clave por sus efectos "arrastre", como las ventas de empresas proveedoras, el desempleo en colectivos con mayores problemas de inserción, o la cohesión territorial.
Zoreda ha señalado que el sector se enfrenta al cuarto trimestre del año en una situación "límite" porque, aunque no sea "el principal", los rebrotes "lo único que hacen es auspiciar caídas crecientes de la actividad de las empresas".
En concreto, según la Encuesta de Confianza Empresarial de Exceltur cerrada el pasado 1 de octubre, se prevén caídas de las ventas de las empresas turísticas de hasta un 77,6%, 16 puntos por encima de lo esperado a mediados de agosto.
El deterioro de las expectativas se extiende a todas las empresas y subsectores de la cadena de valor turísticos. En concreto, las previsiones de caídas de ventas para el cuarto trimestre se elevan al 82,7% en el caso de las agencias de viajes, al 82,5% en los hoteles tanto urbanos como vacaciones, al 72,5% en las de transporte, el 70,5% en el ocio y el 60,1% en el rent a car.
Ante esta situación, las expectativas empresariales de recuperación "se han debilitado considerablemente en tres meses". Mientras a mediados de agosto el 51,2% de los empresarios turísticos esperaba recuperar los niveles anteriores a la pandemia para 2021, en octubre el 46,1% espera que no se recupere hasta al menos 2022 y el 43,7% hasta al menos 2023.
Exceltur considera que estas previsiones anticipan el inicio de un "proceso de destrucción masiva de empleo" que podría afectar hasta a 750.000 empleos turísticos a finales de 2020.
El sector turístico ha cerrado el verano (julio, agosto y septiembre) con un desplome de 39.903 millones de euros en la actividad turística, lo que supone un 69,2% menos que en los mismos meses de 2019.
Exceltur añade que el empleo turístico "sigue siendo el más dañado y el de más lenta recuperación", con 595.000 empleos afectados hasta septiembre, divididos en la reducción de afiliados (281.000 menos que en 2019) y al "alto número de personas incluidas en expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que son 315.000.
La suma de ambos supone una caída del 28,5% respecto a septiembre de 2019, mientras que la media de la economía española se cifra en el 3,6%. Según ha indicado Zoreda, el 42% de las personas en ERTE estaban relacionadas con el sector turístico.
El verano ha estado condicionado por una demanda extranjera "inexistente, con caídas superior al 80% en número de noches y gasto" y una demanda española en niveles un 30% por debajo de la de 2019.
Las ciudades y los destinos insulares han sido los que han registrado las caídas más pronunciadas, mientras que la costa norte o las zonas del litoral de Cádiz y Huelva, más tradicionales para el turismo nacional, han registrado caídas mas moderadas.