VALÈNCIA. Las redes sociales han generado nuevas formas de comunicarse que han demostrado, ahora más que nunca, un cambio de paradigma en las relaciones sociales. Eso de que Internet es el futuro ya suena viejo. Es más que presente. Con él, también, se ha generado, digerido y potenciado su propia economía, dando un giro total a las industrias creativas, una profunda transformación que todavía sigue en curso. Y es en esta ecuación donde se integran los valencianos Anna Devís y Daniel Rueda, que desde que abrieran su ventanita desde Instagram han generado un universo propio que los ha colocado por derecho propio en un lugar privilegiado de la comunicación visual. Esto le viene dado por su trabajo para empresas como Netflix, Disney, Facebook o Coca-Cola pero, también, por una definitiva ‘palmadita en la espalda’ que fija su posición en el ámbito internacional, la de la revista Forbes.
La edición europea de la publicación los ha seleccionado en su prestigioso top ‘Under 30’, un listado que reúne a las principales personalidades en campos como las finanzas, la creatividad o la ciencia de menos de treinta años, una selección de aquellos “visionarios que redefinen con audacia diez industrias en 32 países europeos” y que incluyen a nombres como la activista Greta Thunberg, el cantante británico Olly Alexander o el futbolista español Héctor Bellerín. El listado ha sido curado por el futbolista Bledar Kola, el crítico y curador de arte Hans Ulrich Obrist y la empresaria de moda e influencer Chiara Ferragni, encargados de hacer una selección que incluye a los valencianos Anna Devís y Daniel Rueda en la categoría de ‘Arte y Cultura’, un reconocimiento a un universo “creado sin la ayuda de un software de edición de imágenes” a partir de “objetos cotidianos y la brillante luz natural de España”, reza la publicación.
“Tuvimos que leer el email una y otra vez hasta por fin asimilar que habíamos sido elegidos para formar parte de ese selecto grupo de jóvenes artistas y agentes culturales europeos que reúne Forbes cada año”, explican Devís y Rueda a Culturplaza. En el listado cultural, compuesto por 30 jóvenes europeos, incluyen otros nombres como los de la modelo y actriz inglesa Cara Delevigne o los también españoles Óscar Dayas (chef de Mar Gastrotasca) o Diego Arroyo, Inés Arroyo y Cristian Badía (fundadores de la firma Laagam), un reconocimiento que supone una buena noticia en el mar de incertidumbre actual. “Sin lugar a dudas, para nosotros es todo un reconocimiento a nuestro trabajo pero, aunque cueste admitirlo, recibir tan buena noticia en un momento como éste te deja un sabor de boca un tanto agridulce. No obstante, aunque ahora mismo sea difícil ver más allá de la fatalidad y las malas noticias, creemos que también es importante encontrar esos momentos de felicidad y esas excusas que nos invitan a engalanarnos dentro de casa y celebrar las pequeñas cosas con el mejor humor posible”, explican.
Pero, ¿quiénes son Anna Devís y Daniel Rueda? Se conocieron en la Universitat Politècnica de València, donde ambos se graduaron en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura, un punto de partida que sin duda ha marcado su trabajo posterior en tanto que fotógrafos. Es este bagaje arquitectónico el que forma la baraja con la que juegan a contar historias mediante imágenes divertidas y originales que distan mucho de la fotografía de arquitectura convencional. Para ello basan su estilo en el uso del humor, la creatividad, la precisión y una delicada estética inspirada en la ciudad, la geometría y el minimalismo, en proyecto que siempre parte del lápiz y papel, tal y como desvelaron hace unos meses en una entrevista en Plaza Radio. “Como arquitectos y fotógrafos nuestra máxima es la de poner el acento en los edificios que vemos todos los días, utilizando la creatividad, el humor y el minimalismo como una excusa para hablar de lo importantes que son todas esas arquitecturas anónimas que hay alrededor nuestro. Edificios que normalmente pasan desapercibidos pero que en situaciones como la que estamos viviendo, ahora más que nunca, se convierten en parte fundamental de nuestras vidas”, nos cuentan.
Imposible, con una fotografía del presente que ha cambiado totalmente en cuestión de semanas, no reflexionar sobre el futuro próximo de la comunicación visual y de una creatividad a prueba en tiempos de coronavirus. “Es muy difícil prever qué va a pasar pero, sin duda, esta situación nos ha servido para darnos cuenta de lo flexible que son la creatividad y el ingenio en materia de comunicación”, relatan Devís y Rueda. “Lo vemos, por ejemplo, en los diferentes programas de televisión, que han tenido que aprender de los Youtubers y los creadores de contenido online para seguir llegando a su público ahora que se ha de trabajar con los menores medios posibles. O en las redes sociales, donde la solidaridad de unos pocos ha llenado las casas de todos de música en directo, cursos de aprendizaje gratuitos y comida recién preparada. Sin duda, son estos nuevos canales y estas nuevas formas de comunicar las que están consiguiendo que, aun estando más alejados que nunca, nos sintamos tan unidos como siempre”.
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