Celia y Eugenio Calabuig. Foto: MARGA FERRERVALÈNCIA. El grupo valenciano Global Omnium ha elevado al 88% su participación en Avanqua, la sociedad operadora del Oceanogràfic de València, gracias a una ampliación de capital de 9 millones de euros que ha cubierto en solitario, dado que su socios, el Acuario de Vancouver (Canadá) y Ket Gestión "no han asumido la ampliación", según ha explicado en un comunicado.
La compañía que preside Eugenio Calabuig ha asumido totalmente la ampliación de capital por 9 millones de euros, según el comunicado, "con el fin de evitar la falta de liquidez ocasionada por la pandemia de la covid-19, dar viabilidad a la empresa y asegurar una gestión óptima del acuario hasta finales de marzo". Añade la nota que "con este gran esfuerzo inversor se pretende cubrir al menos hasta marzo la falta de liquidez y seguir optimizando la gestión del Oceanogràfic, en espera de que la tendencia de la pandemia cambie de signo y se restablezca la normalidad".
Según explica Avanqua en su comunicado, "el Oceanogràfic ha sido golpeado especialmente por los efectos de la pandemia y las consecuentes restricciones a la movilidad internacional y en territorio español". En este sentido, ha precisado que desde que tuvo que cerrar en marzo por decreto de la Generalitat, el acuario "ha perdido una afluencia de público en torno a un 70-90 por ciento". No obstante, subraya que esta merma de ingresos "no ha afectado al cuidado de los animales, ni a la experiencia de la visita, ni al mantenimiento de las infraestructuras, que implican gastos fijos del orden del 90 por ciento para el funcionamiento del acuario, tanto si hay visitantes como si no".
Hasta el momento, la plantilla del Oceanogràfic se ha visto afectada por un ERTE -expediente de regulación temporal de empleo- en un 33,87% de media-, añade la nota.
Como publicó Castellón Plaza en exclusiva el pasado 15 de diciembre, Avanqua firmó el pasado mes de julio con la empresa pública Cacsa, propietaria de la instalación, un acuerdo para el mantenimiento del equilibrio económico financiero del contrato después de que, tras varios meses con el acuario cerrado por el estado de alarma, no salieran las cuentas. Un replanteamiento que exime a la empresa presidida por Celia Calabuig de abonar el canon desde el 13 marzo, víspera de la declaración del estado de alarma, hasta el 30 de junio. La cantidad abonada por Avanqua a la empresa pública Cacsa en concepto de canon, fijo más variable, en 2019 ascendió a 10,9 millones de euros.
El acuerdo, dividido en tres fases, contemplaba que entre el 14 de marzo y el 30 de junio pasados, además de no pagar Avanqua el canon, Cacsa abonaría todos los gastos en que hubiera incurrido la gestora, excepto los financieros, incluido el coste de personal soportado por la compañía para mantener a los animales -se realizó un ERTE del 60% de la plantilla-, los gastos en inversiones excepcionales y la parte proporcional de los gastos con carácter anual.
En la fase 2 se contempla el periodo que engloba del 1 de julio, cuando el acuario volvía a abrir sus puertas con el 75% del aforo, hasta el final de 2020. En este plazo ya se contempla que la gestora dirigida por Eduardo Nogués no haga frente al canon mínimo garantizado a favor de Cacsa, aunque sí deja la puerta abierta a que, en el caso de generarse beneficios, se distribuyan entre la empresa pública y la compañía privada en un 59,22% y un 40,78% respectivamente. En este plazo Avanqua estará eximida de realizar las inversiones previstas y, en el caso de que tengan pérdidas, Cacsa asumirá hasta un millón de euros.
La tercera fase pone punto de partida en 2021 y abarca como mínimo todo ese año. El canon variable será 59,22% sobre el resultado de explotación y se establece un canon fijo mínimo garantizado equivalente al 25% del importe previsto en la oferta económica adjudicada para el sexto año, que es de 2 millones de euros a falta de la actualización del IPC. No obstante, estas medidas seguirán sin aplicarse en el caso de que el resultado de explotación sea negativo. En ese caso, se acordarán medidas como las de la fase 2, sin descartar que Cacsa tenga que cubrir parte de esas pérdidas. Al igual que en las otras dos fases, se exime a Avanqua de los pagos a Cacsa como apoyo a a dinamización de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (publicidad, comercialización de la venta de entradas o contenidos), así como los pagos a la inversa por las acciones realizadas por Avanqua. Tampoco cobrará la operadora en ninguna de las tres fases por el lucro cesante derivado de la modificación de la gestión del Ágora.
Global Omnium añade que la cantidad que ha abonado Avanqua a Cacsa en concepto de canon en 2019 ascendió a 10,9 millones de euros, "periodo por el que los socios de Avanqua no se han repartido los dividendos generados a fin de poder mantener a flote el Oceanogràfic".
Igualmente, ha expuesto que Avanqua ha satisfecho a la Generalitat por canon y otros conceptos desde el inicio de la concesión 61,8 millones de euros, desglosados en 56,5 millones en concepto de canon y 5,3 millones por otros conceptos -publicidad y contenidos-. Además, ha indicado, esta firma ha invertido para mejoras de las instalaciones del Oceanogràfic 18,5 millones desde 2015.
