ALICANTE (EFE). El Grupo III de Segunda B vuelve a tener actividad tras el parón navideño con el Hércules y el filial del Villarreal como grandes animadores entre los equipos de la Comunitat Valenciana, mientras que Ontinyent, Castellón y Mestalla se han convertido en las decepciones.
Deportivo Alcoyano y Atlético Levante, los otros dos representantes del fútbol autonómico, están cumpliendo en mayor o menor medida las expectativas creadas y han llegado a las vacaciones instalados en la zona templada de la clasificación.
El Villarreal B, segundo, en el mejor clasificado de los equipos de la Comunitat, ya que se encuentra a un solo punto del líder, el Lleida.
El filial del Villarreal, a pesar de un inicio titubeante, encontró a finales de octubre su juego para instalarse entre los primeros, a pesar de los continuos saltos de sus principales jugadores al primer equipo.
El Hércules, tercero, ha ido de más a menos. Tras firmar un arranque espectacular, el mejor del último medio siglo al sumar cuatro victorias consecutivas, el equipo ha perdido eficacia y brillo, aunque su solidez defensiva, con solo diez goles recibidos, le ha permitido estar siempre en una de las cuatro primeras plazas.
El Deportivo Alcoyano ha sabido rehacerse a un mal inicio de temporada, sobre todo en su estadio de El Collao, para remontar en los últimos dos meses e instalarse en la zona tranquila, al igual que el filial del Levante, que también ha ido de menos a más, aunque sus resultados continúan siendo algo irregulares.
Menos tranquilas han sido las vacaciones navideñas para el Ontinyent, al que el cambio de entrenador, con el regreso de Vicente Parras al banquillo, no ha aliviado de sus problemas clasificatorios.
Tras la brillante temporada pasada, el equipo de El Clariano pasará el final de año en la zona de descenso por culpa de una nefasta racha de resultados en los meses de noviembre y diciembre, aunque igualado a puntos con el Peralada, situado en la promoción de permanencia.
El Mestalla, muy renovado, tampoco le ha tomado el pulso a la categoría y ocupa la antepenúltima posición de la tabla fruto en parte de su debilidad defensiva, ya que es el equipo que más tantos concede.
Con todo, la gran decepción en este primer tramo de la competición es el Castellón, del que se esperaba mucho más en su regreso a la categoría. El equipo de La Plana fue víctima de un pésimo inicio de competición que le llevó a estar catorce partidos seguidos sin ganar, si bien en la mayoría de ellos acabó con empate.
Tras dos cambios en su banquillo, el Castellón ha logrado abandonar el farolillo rojo y su triunfo en la última jornada del año, ya con Óscar Cano como técnico, le mantiene con vida y, pese a todo, a solo tres puntos de la zona de permanencia.
