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250.000 años de edad

Investigadores descubren la exposición al plomo más temprana registrada en dientes neandertales

2/11/2018 - 

MADRID (EP). Un equipo de científicos ha descubierto la exposición al plomo más temprana registrada en dientes neandertales de 250.000 años de edad. Para su trabajo, publicado en la edición digital de 'Science Advances', los científicos usaron dientes para reconstruir el clima durante el desarrollo de eventos clave, incluidos el tiempo de destete y la lactancia, factores determinantes del crecimiento de la población.

El equipo internacional de investigación de antropólogos biológicos, arqueólogos, científicos de la tierra y expertos en exposición ambiental midieron bario, plomo y oxígeno en los dientes en busca de evidencia de lactancia, destete, exposición química y variaciones climáticas a través de los anillos de crecimiento en los dientes. El análisis elemental de los dientes reveló una exposición a corto plazo al plomo durante las estaciones más frías, posiblemente debido a la ingesta de alimentos o agua contaminados, o la inhalación de incendios que contienen plomo.

Durante el desarrollo fetal e infantil, se forma una nueva capa de dientes cada día. A medida que cada uno de estos "anillos de crecimiento" se crea, algunos de los muchos químicos que circulan en el cuerpo son capturados en cada capa, lo que proporciona un registro cronológico de la exposición. El equipo de investigación usó láseres para muestrear estas capas y reconstruir las exposiciones pasadas a lo largo de marcas incrementales, similar al uso de anillos de crecimiento en un árbol para determinar el historial de crecimiento del árbol.

Esta evidencia permitió al equipo relacionar el desarrollo de los individuos con las estaciones antiguas, revelando que un neandertal nació en la primavera y que dos niños neandertales tenían más probabilidades de estar enfermos durante los periodos más fríos. Los hallazgos son consistentes con el patrón de los mamíferos de criar descendencia durante los periodos de mayor disponibilidad de alimentos.

Nuevo enfoque para investigar sobre especies extintas

La duración de la lactancia de 2,5 años en un individuo es similar a la edad promedio de destete en poblaciones humanas preindustriales. Los investigadores señalan que no pueden hacer amplias generalizaciones sobre los neandertales debido al pequeño tamaño del estudio, pero que sus métodos de investigación ofrecen un nuevo enfoque para responder a preguntas sobre especies extintas durante mucho tiempo.

"Tradicionalmente, la gente pensaba que la exposición al plomo se producía en poblaciones solo después de la industrialización, pero estos resultados muestran que ocurrió prehistóricamente, antes de que el plomo se hubiera difundido ampliamente en el medio ambiente --dice una de las autoras principales del estudio, Christine Austin, profesora asistente en el Departamento de Medicina Ambiental y Salud Pública de la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai--. Nuestro equipo planea analizar más dientes de nuestros antepasados ??e investigar cómo las exposiciones al plomo pueden haber afectado a su salud y cómo eso puede relacionarse con la forma en que nuestros cuerpos responden hoy al plomo".

"Los patrones dietéticos en nuestra vida temprana tienen consecuencias de largo alcance para nuestra salud, y al entender cómo evolucionó la lactancia materna, podemos ayudar a guiar a la población actual en lo que es una buena práctica de lactancia materna --afirma Manish Arora, profesor y vicepresidente del Departamento de Medicina Ambiental y Salud Pública en la Escuela de Medicina Icahn--. Nuestro equipo de investigación está trabajando en la aplicación de estas técnicas en poblaciones contemporáneas para estudiar cómo la lactancia materna altera las trayectorias de salud, incluidas las de desarrollo neurológico, salud cardiaca y otros resultados de salud de alta prioridad".

"Este estudio reporta un gran avance en la reconstrucción de climas antiguos, un factor significativo en la evolución humana, ya que la temperatura y los ciclos de precipitación influyeron en los paisajes y recursos alimenticios en los que se basaron nuestros ancestros", concluye la autora principal del estudio, Tanya Smith, profesora asociada en la Universidad de Griffith. 

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