VALÈNCIA. La Comisión de Valoración de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) eligió este viernes a Francesc García Donet y Alfred Costa como los dos finalistas del proceso de selección del nuevo director general de À Punt. Una convocatoria motivada por que el mandato de Empar Marco vence el próximo mes de marzo.
El resultado del proceso generó cierto estupor por una cuestión principal: el órgano que debía evaluar en primera instancia el proyecto y currículum de los candidatos a dirigir la nueva radiotelevisión valenciana tenía la opción de elegir un máximo de tres finalistas de entre los nueve aspirantes -uno de los diez que optaban decidió retirarse a mitad del proceso- y tan solo vio aptos a dos de ellos.
En este sentido, fuentes conocedoras del procedimiento aseguran a este diario que el resto no llegaron a la puntuación mínima exigida que la Comisión consideró oportuna. Una nota mínima del proyecto y el currículum (en esta primera fase no se realizaba entrevista) que, huelga señalar, las bases de la convocatoria no especificaban con claridad.
No en vano, el acuerdo que alcanzó el Consejo Rector el 15 de noviembre determinaba los aspectos que la Comisión de Valoración tendría en cuenta para evaluar el proyecto, cuya nota máxima sería de 10 puntos, y otra serie de ítems que se puntuarían al examinar los currículums, valorados sobre 10 puntos también. Ahora bien, las bases no fijaban que se tuviera que alcanzar una nota mínima en ninguna de las dos partes de esa 'prueba' o en la suma de ambas.
Con todo, hasta ocho candidatos fueron descartados en esta primera parte del concurso en el que tan solo García Donet y Costa superaron el corte de la Comisión. Dos perfiles que agradaban al PSPV y que no lo hacían tanto en el resto de formaciones, especialmente en Compromís, donde consideran que los dos candidatos tienen "claros" vínculos con los socialistas -los dos son exconcejales: el primero en el Ayuntamiento de Cullera y el segundo en Torrent- y hubiera sido oportuna la elección de un tercer finalista.
Ahora, ambos deberán desarrollar sus proyectos en un máximo de 50 páginas que tendrán que entregar antes del 3 de febrero por registro de entrada en la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació. Un documento que, en esta ocasión, será el Consejo Rector quien lo evalúe y no la Comisión de Valoración. El máximo órgano de dirección del ente, además, puntuará los currículums de los dos finalistas, que también deberán enfrentarse a una entrevista personal. Así, por una parte el proyecto se evaluará sobre 50 puntos, mientras que la entrevista y el currículum pesarán otros 50 puntos sobre el total de la nota.
Sin embargo, conviene apuntar que así como en el documento acordado por el Consejo Rector queda especificado qué criterios se tendrían en cuenta a la hora de puntuar el proyecto y cuál sería la nota de cada ítem, no ocurre lo mismo con la entrevista y la calificación de los méritos. Es decir, el consejo de administración de À Punt no precisa en su acuerdo qué peso tendrá cada parte dentro de ese 50%.
Una vez el Consejo Rector que preside Enrique Soriano elija a un ganador -tendrá que reunir el apoyo de tres quintas partes del órgano, o lo que es lo mismo, el voto de seis consejeros-, se remitirá la candidatura a Les Corts Valencianes, donde el elegido deberá comparecer para pasar un examen de idoneidad y lograr la mayoría absoluta de apoyos de la comisión parlamentaria de RTVV y del Espacio Audiovisual. Si no lo consiguiera, el Parlamento podría tumbar la propuesta y el Consejo debería volverse a enfrentar a la elección de un candidato, tal y como reza la normativa aprobada en 2016.
Licenciado en Filosofía y en Arte Dramático, García Donet es consultor asociado de Llorente & Cuenca y administrador de la la empresa OnAir, donde ha ejercido de guionista y labores de producción y dirección en varios proyectos audiovisuales. Uno de ellos, de hecho, para la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC). En concreto, la propuesta de la programación en pruebas de À Punt.
Durante tres años, de 2004 a 2007, fue asesor del Gabinete del exministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, etapa en la que participó en el proceso de elaboración de la ley del Estatuto Básico del Empleado Público. Además ejerció labores de dirección en la antigua radiotelevisión valenciana al frente de la producción ejecutiva de 1988 a 2004 y de 2008 a 2013.
Alfred Costa trabajó en la antigua RTVV de 1990 a 2013, donde ejerció cargos como el de subdirector de programación, jefe de sección de ficción seriada y responsable del departamento de nuevos proyectos y entretenimiento. Tras el cierre de Canal 9 fue en la pasada legislatura concejal del PSPV en el Ayuntamiento de Torrent, hasta que logró entrar en la nueva À Punt, donde a día de hoy ejerce de jefe de emisiones.