VALÈNCIA. (EFE) La fiscal ha dicho en su informe en el juicio que la adjudicación a Gürtel de un contrato para la visita de papa a València en 2006 estaba "plagada de burdas ilegalidades" y fue fruto de un encargo del entonces president de la Generalitat, Francisco Camps, al número 3 de la trama, Álvaro Pérez, el Bigotes.
La Audiencia Nacional ha reanudado este miércoles el juicio a los veinte acusados de esta pieza del caso de corrupción relacionado con el PP, seguida por la adjudicación de un contrato de más de siete millones de euros al entramado liderado por Francisco Correa para un montaje de pantallas y sonido con motivo de la visita del papa Benedicto XVI a València en julio de 2006.
"Nos encontramos primero con un encargo directo y personal a Álvaro Pérez, que era el representante en Valencia de las empresas de Francisco Correa", el cabecilla de la trama, ha señalado la fiscal anticorrupción Concepción Nicolás.
Y ha añadido: "Álvaro Pérez nos refirió que él recibió el encargo de Francisco Camps".
Además ha relatado que en la agenda intervenida a Álvaro Pérez se ve cómo este deja constancia de reuniones de personas que formaban parte de la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias, entre ellas Francisco Camps, con las empresas de Correa.
La fiscal ha explicado que ha pedido que se investigue por falso testimonio a Camps por su declaración como testigo en este juicio. "Francisco Camps dijo que no había ido nunca con Álvaro Pérez ni a Roma ni a ningún sitio, cuando un sastre testificó que habían encargado dos chaqués para ir a Roma cuando se nombró cardenal al arzobispo de València el 24 de marzo de 2006 y que eran para los dos", ha recordado.
Ha abundado en que la Policía Nacional incautó al grupo anotaciones del viaje y el pago de los billetes a Roma y comprobaron en las conversaciones telefónicas intervenidas que Álvaro Perez ya iba diciendo en el mismo que él era el contratista encargado de las pantallas.
Según ha explicado la fiscal, tras asumir la Radiotelevisión Valenciana (RTVV) la señal de la retransmisión de la visita del papa el entramado de Gürtel consiguió que el ente público le adjudicara un montaje de pantallas y sonido en las calles de València por "un precio desorbitado" de más de siete millones de euros, con un sobrecoste de más de tres millones.
Ha añadido que para ello la trama usó a Teconsa, una empresa de la construcción que no pertenece al sector audiovisual que el grupo de Correa usó como sociedad pantalla para que figurara como la adjudicataria de este contrato a cambio de una comisión de 200.000 euros y desde la que salieron los flujos de dinero con facturas ficticias con la que se lucraron los acusados de la trama.
La fiscal ha recalcado que el entonces director general de RTVV, el acusado Pedro García Gimeno, vulnerando las normas de contratación pública llevó a cabo actuaciones para la adjudicación directa, y no por concurso público, a Teconsa de dicho contrato, con un expediente falso que fue elaborado para dar apariencia de legalidad a la adjudicación.
Así, Pedro García Gimeno se repartió los citados más de tres millones de euros de sobrecoste del contrato, que era dinero público soportado por la RTVV, con los miembros de la trama Francisco Correa, Pablo Crespo; Álvaro Pérez, el Bigotes, y el también acusado Ramón Blanco Balín, asesor del grupo, siempre según la fiscal.
La fiscal ha destacado el papel que tuvo "en la selección los contratistas y en la adjudicación directa de los contratos" el entonces vicepresidente tercero del Consell, Juan Cotino, que declaró como acusado en esta causa antes de morir por coronavirus.
Ha recordado que "Juan Cotino era una persona que había desempeñado diversos cargos públicos, había sido director general de la Policía, concejal del Ayuntamiento, delegado del Gobierno, consejero y presidente de las Cortes".
"No tenía ningún cargo en el PP pero sí influencia sobre otras personas con cargos decisivos, como pudiera ser Francisco Camps, y capacidad de decisión para que fuera Álvaro Pérez quien ejecutara el suministro de las pantallas con su empresa Orange Market, que era la que realizaban actos, mítines y campañas del partido", ha indicado.
La fiscal pide las mayores penas para los dos principales miembros de la trama, Correa y Crespo, 38 y 37 años de prisión, respectivamente, y ha rebajado de 37 a 10 diez su solicitud para Álvaro Pérez, tras el acuerdo de este con la Fiscalía para confesar los hechos. Los tres ya están cumpliendo condenas por otras pieza de Gürtel.
Fruto también de dicho acuerdo pide siete años de cárcel para Pedro García Gimeno y un año y siete meses para Ramón Blanco Balín. Igualmente, solicita para ocho exdirectivos de RTVV y para siete empresarios penas que oscilan entre los ocho meses y los 29 años, esta última en concreto para el administrador de Teconsa, José Luis Martínez Parra.
La Audiencia Nacional no ve ningún delito en la actuación del expresidente de la Generalitat respecto a las adjudicaciones y contrataciones con la trama; la sentencia absuelve a Alicia de Miguel, Manuel Cervera, Luis Rosado y David Serra, aunque condena a varios cargos del Consell