CASTELLÓ. (EP). Un estudio de la Universitat Jaume I ha diseñado una herramienta estadística innovadora para mejorar el control de la polución en las ciudades. El trabajo, liderado por la investigadora Ana Belén Vicente Fortea del Departamento de Ciencias Agrarias y del Medio Natural, propone el uso de covariables para fijar "puntos de muestreo" representativos de la contaminación atmosférica en entornos urbanos.
La investigación, cuyos resultados se han publicado en la revista Environmental Pollution, también analiza la relación entre la calidad del aire y el cambio climático. El trabajo propone un nuevo método estadístico "para abordar uno de los principales problemas que emerge en la evaluación de la calidad del aire en un área de estudio: decidir el número de puntos de muestreo representativos de cada microambiente", ha detallado Ana Belén Vicente Fortea, perteneciente al Área de Cristalografía y Mineralogía.
"Nosotros hemos incorporado, por primera vez, las covariables porque demostramos que reducen la variabilidad y aumentan la calidad de la comparación de la polución de los puntos de muestreo", han agregan los autores del trabajo, en el que han colaborado científicos de la UJI, la Universidad Nacional Autónoma de México y la Pompeu Fabra de Barcelona.
Los investigadores de la UJI explican que, hasta ahora, otros científicos han utilizado el coeficiente de correlación de Pearson o el de divergencia para encontrar diferencias significativas de estadística básica. Sin embargo, el trabajo que han realizado "revela que la aplicación de las covariables incrementa la resolución del control de la polución".
Las covariables son los distintos elementos que se añaden a los modelos y que influyen sobre el valor de la variable y que, además, mejoran la posible predicción de esta misma variable. En concreto, este estudio se centra en la variabilidad de la concentración de las partículas en suspensión PM10 en espacio y tiempo.
En este estudio, se mejora el coeficiente de divergencia y de redundancia (CODR) con la inclusión como covariables de la distancia entre estaciones y también del coeficiente de variación de Pearson. Este nuevo coeficiente es referenciado como CODRcv(d) y con la representación frente a la distancia entre estaciones en España, México e Italia, permite mejorar la decisión de cuántas estaciones son necesarias para el muestreo de PM10.
En el caso de Castelló, el uso de las covariables ayudaría a mejorar la caracterización de las zonas de estudio. "Sabríamos el número de estaciones que son necesarias para caracterizar un área en concreto y los lugares donde colocarlas. De esta manera, podríamos evaluar zonas de riesgo para la población de una manera más exacta y, además, ahorrar fondos públicos", ha aseverado la experta.
El objetivo de esta investigación era analizar cómo se comporta el nuevo método estadístico en ambientes diferentes con el fin de ser una herramienta útil para el desarrollo de futuros planes de calidad del aire en otras áreas industrializadas. Las tres zonas estudiadas han sido Vila-real, la macro ciudad de Monterrey en México y la región de Piamonte en Italia.
La provincia en la que se encuentra Vila-real es una zona "estratégica" en el marco del control de la contaminación de la Unión Europea. Aproximadamente el 80 por ciento de las baldosas cerámicas europeas y los fabricantes de fritas cerámicas se concentran en dos áreas, formando los llamados clústeres cerámicos: uno está en Módena (Italia) y el otro en Castellón.
El investigador de la UJI Sergi Meseguer recuerda que en este tipo de áreas "hay una gran cantidad de contaminantes en el aire provenientes de este tipo de industria, por lo que es difícil cumplir los límites establecidos por la normativa europea en cuanto a partículas en suspensión".
Por otro lado, la ciudad mexicana de Monterrey, del estado norteño de Nuevo León, presenta niveles altos de concentración de materia particulada en la atmósfera producido por la extracción de materiales de construcción en la colina que rodea la ciudad.
Finalmente, la región de Piamonte, al norte de Italia, presenta problemas de contaminación del aire, principalmente porque incluye la mayor área industrial, comercial y agrícola con alta densidad de población en Italia. En consecuencia, la población está expuesta a niveles altos de contaminación.
Este estudio ha sido resultado de la colaboración entre los investigadores Ana Belén Vicente Fortea y Sergi Meseguer Costa del Departamento de Ciencias Agrarias y del Medio Natural; Pablo Juan Verdoy del Departamento de Matemáticas de la Universitat Jaume I; Carlos Díaz Ávalos del Departamento de Probabilidad y Estadística de la Universidad Nacional Autónoma de México, y Laura Serra Saurina del Departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, durante su estancia en la Unidad de Bioestadística de la Universidad de Florencia en Italia.