Como dice Antonio Escohotado, “dejar que el otro sea libre es la gran asignatura pendiente de la humanidad”.
Es cierto que el término “liberalismo” forma parte de nuestro vocabulario político diario. Sin embargo, se trata de una etiqueta ideológica que no tiene un significado preciso y riguroso en el imaginario colectivo. Mucha gente es de ideas liberales sin saberlo y muchos de los que se dicen liberales están en las antípodas de lo que el “liberalismo” defiende y persigue. Políticos, periodistas o analistas han acabado por deformar el término hasta tal punto que, convertido en cajón de sastre donde todo tiene cabida, la palabra liberalismo parece que ha pasado a no significar absolutamente nada.
Con todo, puedo asegurar que el liberalismo existe como filosofía política, y que cuenta con unos principios concretos dirigidos a alcanzar un fin determinado: defender y proteger la libertad de cada persona para escoger la manera en que quiere vivir su propia vida. Decía que existe el liberalismo como ideología y existe un partido -el único- en el panorama nacional que defiende sus principios. El único partido político español que forma parte de la familia liberal europea. Estoy hablando de Ciudadanos.
Ser liberal es defender la igualdad de todos los individuos porque todos tienen los mismos derechos y el mayor derecho es la libertad. Ser liberal, por tanto, es también procurar protección a las minorías que pueden ver peligrar su igualdad de oportunidades. Ser liberal es defender la economía de mercado, estar a favor de la globalización, la competitividad y la meritocracia. Un liberal defiende un Gobierno limitado cuyo principal acometido sea velar por los derechos y las libertades individuales.
Hoy, Ciudadanos es el único partido liberal en España y en la Comunitat Valenciana que tiene como banderas la libertad, la tolerancia y la igualdad. Una alternativa liberal que enriquece el debate y que puede ser decisivo para formar coaliciones, ya sea con conservadores, ya sea con socialdemócratas, porque lo importante serán los principios y políticas que se defienden y no con quién se defienden. Una alternativa liberal que ejerce de fuerza moderadora y centrípeta.
Cada semana en el Congreso y en Les Corts tenemos motivos reales para ver que necesitamos una alternativa política y moral que defienda el liberalismo y que haga frente a los retos que debemos abordar. Porque la libertad se defiende en todos los ámbitos y esferas, no solo en la económica.
Y digo esto porque, por desgracia, tenemos partidos políticos que dicen defender la libertad, como el PP, pero que recurrieron ante el Tribunal Constitucional la Ley del aborto o la Ley del matrimonio igualitario. En los últimos tiempos hemos presenciado varios ejemplos de esta incoherencia.
Hemos visto en la Cámara Baja cómo los prejuicios del Partido Socialista y del Partido Popular han impedido siquiera que empecemos a debatir una Ley para proteger los derechos de las personas transexuales. Una Ley, la Ley 'Trans', que sin embargo sí salió adelante en Les Corts pese al voto en contra del PP. También sin los votos del PP (que se abstuvo) se aprobó la Ley de Igualdad de las personas LGTBI en la Comunitat Valenciana. Y un último ejemplo: el partido Vox ha votado en contra de una ley de infancia. El único partido de toda la cámara que se ha opuesto a que protejamos los derechos de los menores con una legislación que recomiendan las organizaciones internacionales.
Defender la libertad por encima de todas las cosas es algo que no todos pueden hacer. Ser liberal, a diferencia de lo que sucede con otras corrientes políticas, no es imponer al individuo una idea determinada de cómo debe vivir su vida (imponer lo que está bien o lo que está mal), sino limitarse a plantear las condiciones normativas para que cada individuo persiga y consiga vivir como quiera su propia vida (establecer las condicione para que cada persona pueda alcanzar su particular concepción de lo que está bien).
Por eso, para mí es un orgullo y una responsabilidad muy grande asumir el papel de coordinadora de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana. Un servicio que quiero desarrollar escuchando a todos los valencianos, anteponiendo el interés general y buscando, día a día, la forma de ser lo más útiles posibles.
Estoy orgullosa de formar parte del partido liberal, el único de España, que vota sin complejos siempre a favor de las libertades individuales y de la libertad de mercado, que defiende a las minorías y cree que en la igualdad de las personas. Y siento como un privilegio poder realizarlo contando con todos y cada uno de los valencianos en esta nueva etapa que estamos abriendo.