Foto: CORTSVALÈNCIA. El fin del estado de alarma el próximo 9 de mayo ha generado numerosas incógnitas en las comunidades autónomas, cuyos gobiernos estudian el margen de maniobra que les quedará a partir de esa fecha para aplicar restricciones que permitan contener el número de contagios. Un escenario que preocupa especialmente a aquellos territorios donde la incidencia acumulada está por encima de la media o directamente descontrolada, como es el caso del País Vasco.
En el caso de la Comunitat Valenciana, el president de la Generalitat, Ximo Puig, anunció este lunes que su intención es prorrogar a partir del próximo domingo el toque de queda, aunque quizá ampliando la hora en la que se prohíba la circulación nocturna. Un planteamiento que, no obstante, genera dudas entre expertos de Derecho Constitucional, que coinciden en que el Consell no podrá aplicar esta medida sin el marco del estado de alarma en vigor puesto que limita un derecho fundamental que solo puede limitarse bajo el estado de alarma.
Con las dudas sobre el toque de queda en el aire, lo que el Gobierno valenciano no barajaba hacer y así lo aclaró también Puig este lunes era cerrar perimetralmente la autonomía, dado que sin estado de alarma es constitucionalmente inviable que las comunidades autónomas puedan aprobar esta restricción.
Sin embargo, apenas 24 horas después del anuncio del jefe del Consell la síndica de Unides Podem, Pilar Lima, puso un tuit en su perfil de Twitter personal que desconcertó y molestó a partes iguales a sus socios del Botànic, el PSPV. En concreto, la también coordinadora de los morados explicaba que el cierre perimetral de la Comunitat había sido la medida "más efectiva para mantener una incidencia acumulada muy inferior a las de otras autonomías". "En consecuencia, conviene estudiar vías legales de acuerdo con el Gobierno central que permitan su prórroga", proponía Lima.
"La Comunitat no es un territorio aislado, estamos interconectados con España y con Europa que tienen índices de contagios mucho más elevados, de manera que levantar las restricciones actuales podría comportar un empeoramiento equiparable al de otras regiones", continuaba el hilo de Twitter para más tarde cerrar el debate con una petición a "los fascistas" que pudiesen cuestionar su criterio así como para abordar otro tema completamente diferente como la liberalización de patentes de la vacuna: "Y no vengáis los fascistas a darme lecciones de libertad, hablamos de salvar vidas y no colapsar la sanidad pública. Urge avanzar en la vacunación masiva y la inmunidad de grupo. Urge liberar las patentes".
Los mensajes despertaron cierta sorpresa entre los socialistas, que en pequeños círculos destacaban que prorrogar el cierre perimetral tras el 9 de mayo era inviable sin estado de alarma para las autonomías. "Si es que no se puede hacer lo que ella dice, que lo dice la Constitución, es sentido común", comentaba un representante del PSPV con cierta irritación.
Al tono de asombro también se sumaba el del malestar de otros sectores de los socialistas. "Lo dice como si Podemos no formara parte del Gobierno central, que se lo pida a sus ministros, que también gobiernan", apostillaba una parlamentaria del PSPV en relación al primer mensaje de Lima en el que pedía "estudiar las vías legales" junto al Ejecutivo central para poder prorrogar el cierre perimetral, que en definitiva solo cabe bajo un estado de alarma.
