MADRID. Los títulos de NIO Inc, el Tesla chino, sufren en bolsa lo mismo que su homóloga californiana y sus acciones acumulan una corrección del 50% desde los máximos históricos marcados el pasado mes de enero en los 67 dólares por acción.
A diferencia de lo que sucede con Zoom, que navega de forma un poco más independiente, la suerte de NIO corre más pareja a la de la compañía de Elon Musk, así que probablemente necesite que los inversores vuelvan también a Tesla antes de ver cómo las órdenes de compran comienzan a ser mayoritarias también en la firma china.
El principal obstáculo que se interpone entre el precio de las acciones de NIO y un rebote es la cota de los 38 dólares por acción, que le impide volver otra vez al rango de precios en el que se venía moviendo de forma ininterrumpida desde comienzos de noviembre.
Por abajo, el nivel de los 32 dólares por acción es la primera aspiración de los bajistas, ya que les abriría las puertas a extender los recortes hasta el nivel de los 28 dólares, primero, y los 22 dólares por acción, después.