VALÈNCIA (EFE). La Asociación de Campos de Golf de la Costa Blanca (ACGCBCV) y la Federación de Golf de la Comunitat Valenciana (FGCV) han elaborado de forma conjunta un protocolo de recomendaciones para que se pueda jugar de forma segura y evitar el contagio del COVID-19 una vez se abran los campos.
El protocolo incluye normas, pautas y recomendaciones tanto para el personal del propio campo como para los jugadores y socios y está dividido en cinco bloques con el objetivo de “aportar confianza y seguridad”, según explicó el presidente de la FGCV, Andrés Torrubia, en unas declaraciones facilitadas por la entidad valenciana.
Las nuevas normas o recomendaciones más destacadas, al margen de las ya hechas por las autoridades sanitarias en referencia a la higiene personal, el uso de mascarillas o la distancia social, son la prohibición de tocar el mástil de la bandera o de intercambiar los palos con el compañero de partida, se retirarán los rastrillos para alisar la arena y tampoco se permitirá darse la mano al final del juego.
Este protocolo también subraya que la práctica del golf supone un “escaso riesgo de contagio en comparación con otras actividades deportivas masificadas” que implican contacto físico y que se disputan en recintos cerrados e incluso con público.
El presidente de la ACGCBCV, Salvador Lucas, explicó que el golf es una actividad “especialmente segura y saludable” al practicarse en un espacio natural amplio al aire libre en el que las partidas son de un máximo de cuatro jugadores, con una salida en intervalos de unos diez minutos y destacó que es un deporte “cardiosaludable y su práctica es muy beneficiosa tanto física como psíquicamente”.
Estas medidas, según comunicaron fuentes de la FGCV, ya han sido adoptadas en países como Alemania, que acaba de reabrir sus campos, Dinamarca, Noruega o Finlandia y el documento se ha puesto a disposición del resto de asociaciones y federaciones territoriales para que pueda ser usado “en beneficio de una vuelta segura y responsable”.
