Los opositores docentes tendrán que acreditar el C1 de valenciano 

VALÈNCIA (EP). La Conselleria de Educación plantea que los aspirantes a las oposiciones docentes tengan que acreditar el nivel C1 de valenciano y no el 'Certificado de capacitación para la enseñanza en valenciano' y el 'Diploma de maestro de valenciano', que pasarían a considerarse méritos.

Se trata de una propuesta que tratará este jueves, 17 de octubre, en la Mesa Sectorial con los sindicatos de la enseñanza: el anteproyecto de orden por la que se determina la competencia lingüística necesaria para acceder a los puestos de trabajo docente.

La nueva propuesta de orden pretende actualizar, adaptar y simplificar la normativa actual, tras 36 años desde la entrada en vigor de la 'Llei d'ús i ensenyament del valencià', detalla en un comunicado el departamento que dirige Vicent Marzà.

El objetivo es "racionalizar" las exigencias para el acceso a la función pública docente, así como adaptarlas a la realidad de la formación y garantizar que los alumnos aprenden de profesores con la competencia lingüística suficiente.

"Había que actualizar la normativa a un contexto que ha evolucionado mucho en más de tres décadas y con una nueva ley de plurilingüismo en vigor", ha destacado el director general de Política Lingüística y Gestión del Multilingüismo, Rubén Trenzano.

En esta línea, si las primeras actuaciones hace más de tres décadas respondían a una necesidad por la "carencia" en la formación ordinaria, Educación entiende que no puede "continuar actuando como si esa carencia no hubiera estado corregida", con la intención de adaptarse "a los nuevos tiempos y las nuevas necesidades"

Con la nueva propuesta, los aspirantes a los próximos procesos de oposiciones docentes que se convoquen deberán certificar el C1 de valenciano. Este nivel, según el Marco Europeo Común de Referencia para las Lenguas, acredita un dominio funcional efectivo de la lengua y representa un nivel avanzado de competencia adecuado para tareas más complejas de trabajo y de estudio.

Por tanto, desaparecerían como requisito obligatorio tanto la Capacitació como el 'Diploma de Maestro de Valenciano', que pasarían a considerarse méritos. El anteproyecto contempla que las universidades deben garantizar que la competencia didáctica sea la adecuada para el cumplimiento de los objetivos de la Ley de plurilingüismo.

Esto se haría, por una parte, a través del máster que habilita para el ejercicio de las profesiones de profesorado de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y enseñanza de idiomas, y mediante los títulos de grado que habilitan para el ejercicio de la profesión de maestro en Educación Infantil y/o Primaria.

La regulación de la Capacitació y el 'Diploma de Maestro de Valenciano' se cumple actualmente mediante otros mecanismos en los estudios previos; es decir, el máster en el caso de Secundaria y el grado en Infantil y Primaria. "Mantenemos la certificación de la competencia lingüística pertinente, que en este caso continúa siendo de un nivel C1 de valenciano", ha subrayado el responsable de Política Lingüística.

Con la nueva orden, Educación pretende incidir con la nueva orden en la formación continuada del profesorado después de convertirse en funcionario público, "una formación de calidad que acompañe a los profesionales de la enseñanza durante toda su carrera docente", mediante los planes anuales de formación permanente del profesorado que desarrollan los Cefire (Centro de Formación, Innovación y Recursos educativos).

En definitiva, una formación para "garantizar la competencia didáctica necesaria para impartir áreas, materias o módulos no lingüísticos en valenciano, en inglés o en otras lenguas de acuerdo con la Ley de plurilingüismo".