Los podólogos piden el cierre de todos los centros y dejar solo servicios mínimos de urgencia

25/03/2020 - 

VALÈNCIA. El Colegio de Podólogos de la Comunitat Valenciana (ICOPCV) ha solicitado a la Conselleria de Sanidad el cierre inmediato de todos los centros de podología y dejar únicamente servicios mínimos de urgencia que eviten el desplazamiento de pacientes a centros de salud y hospitales, como curas de cirugías en el pie o tobillo, infecciones o dolencias en pacientes de riesgo como diabéticos o en hemodiálisis.

Se trata de una iniciativa llevada a cabo junto a otros colegios del sector sanitario, como son los fisioterapeutas, nutricionistas, logopedas y ópticos-optometristas, ante el estado de alarma decretado en España por el coronavirus. La petición responde a la voluntad de frenar la tasa de contagios y a la falta de material sanitario."La necesidad fundamental ahora mismo ante esta crisis sanitaria, es la de revertir la curva de contagio. Es compromiso de todos eliminar cualquier vía de propagación posible y, en estos momentos, no podemos garantizar a nuestros pacientes una asistencia segura por la excepcional situación que vivimos", ha defendido en un comunicado la presidenta del colegio, Maite García.

Entre los motivos que impiden ofrecer una asistencia segura a los pacientes destaca el hecho de que las intervenciones terapéuticas implican un contacto directo con el paciente, muy cercano y mantenido en el tiempo, lo que aumenta el riesgo de contagio entre el profesional y el paciente.

Paralelamente, el Colegio de Podólogos recuerda que la gran mayoría de los procedimientos terapéuticos pueden ser pospuestos por su carácter no urgente y, de esta forma, se evitaría el desplazamiento de ciudadanos a sus centros, que puede contribuir a la propagación del virus innecesariamente.

A esto suma que el 90% de los profesionales de este sector trabajan de forma privada y "no se dispone de material de protección para pacientes ni profesionales, ni hay acceso a su compra por el desabastecimiento general". Sus colegiados han donado material de EPI (equipos de protección especial) a hospitales, centros de salud y residencias de forma voluntaria. Por tanto, "el material ha quedado limitado en clínicas para posibles urgencias".

 Así, su petición a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, es que se realice una asistencia de podología únicamente en aquellas situaciones donde la actuación urgente sea fundamental para evitar que el paciente acuda a un centro de salud u hospital,

Estos colegios profesionales han decidido cerrar sus instalaciones para preservar así la salud de sus pacientes y de los propios profesionales sanitarios, si bien alertan que "la situación, unida a la orden que indica estos establecimientos pueden permanecer abiertos provoca una indefensión manifiesta a la hora de poder acceder a las medidas que, en el ámbito laboral, determine el Consejo de Ministros y la Conselleria de Sanidad".

 

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