VALÈNCIA. Los supermercados valencianos mantienen para este 2020 sus planes de inversión de 170 millones de euros para la apertura de 37 tiendas y la ejecución de 54 reformas bajo criterios ecoeficientes, unas actuaciones que suponen la creación de 500 empleos, todos ellos de carácter fijo.
El director de la Asociación de supermercados de la Comunidad Valenciana (Asucova), Pedro Reig, ha asegurado en una entrevista a EFE que durante el confinamiento no se ha detenido el proceso de apertura de nuevas tiendas e incluso hace dos semanas abrió un supermercado en Denia, y ha señalado que si no se va más rápido, es "porque no nos dejan".
Reig reclama a la administración autonómica que no introduzca nuevos proyectos legislativos que supongan "cuellos de botella" que ralenticen la recuperación económica o impongan nuevas tasas, y considera que es el momento de acelerar las licencias de apertura con declaraciones responsables y aplicar el silencio administrativo positivo por parte de los ayuntamientos.
Los supermercados valencianos asociados a Asucova (Mercadona, Consum, masymas, Dialprix y Dialsur), con más de mil puntos de venta en la Comunitat Valenciana, que representan el 60 % de la superficie de alimentación organizada, continúan con sus planes de nuevos establecimientos.
Entre tiendas propias y franquicias, estas marcas prevén durante este año la apertura de 37 supermercados, si bien una pequeña parte de ellos ya ha sido abierta en esta primera parte del ejercicio.
Además, hay planeadas 54 reformas completas de tiendas basadas en la implantación de criterios del modelo ecoeficiente, en mejoras de las secciones existentes e introducción de nuevas (como la de comida preparada) y para propiciar un acto de compra más experiencial. Y reformas parciales de secciones en más de 60 tiendas.
Todas estas actuaciones suponen una inversión de 170 millones de euros, que en su mayor parte se llevará a cabo de aquí a final de año, y la creación de 500 nuevos empleos, todos ellos fijos.
"Los supermercados mantienen las inversiones previstas y apuestan por una rápida recuperación de la economía y de la forma más dinámica", ha declarado Reig.
"La reactivación del turismo es importantísima", de ahí la necesidad de que se flexibilicen las medidas para la llegada de los turistas para muchos sectores económicos, y "no vemos ninguna razón para que no lleguen", según Reig.
Si habitualmente en la temporada de verano los supermercados ubicados en zonas turísticas llegan a incrementar las contrataciones entre un 20 y un 50 %, el alto grado de incertidumbre sobre la llegada de turistas impide hacer previsiones para el verano postcovid.
En España 3.500 supermercados están localizados en zona turística, y muchos de ellos están gestionados por franquiciados, es decir, pequeños comerciantes, y "muchos dependen de la temporada de verano", ha alertado el director de Asucova.
Reig ha lanzado un mensaje de "tranquilidad y confianza" a los turistas y afirma: "Nuestros supermercados están preparados, adecuados y listos para que el consumidor nos perciba como un entorno seguro, sin relajarnos en las medidas de seguridad".
En términos generales, demandan flexibilizar y facilitar la implantación de los supermercados, que han demostrado como sectores esenciales su carácter de proximidad, su gran capilaridad, han garantizado el surtido y el abastecimiento. Por eso, Reig reclama a la administración local que facilite las licencias de apertura con declaraciones de responsabilidad del solicitante y el silencio administrativo positivo.
A la Generalitat insta a no introducir nuevos proyectos legislativos que supongan "cuellos de botella" que ralenticen la recuperación o que no incorporen nuevas tasas, como la que recoge el borrador de la futura ley valenciana de Cambio Climático y Transición Ecológica para los supermercados de más de 1.300 m2 que no estén ubicados en zona urbana, porque considera que "va en contra del modelo de proximidad".
"Nos hemos consolidado como sector estratégico y esencial -durante la pandemia- y pedimos que se faciliten las nuevas aperturas y mayor eficiencia en la tramitación administrativa a nivel municipal. Eso es lo fundamental ahora mismo", ha manifestado.
"Hemos hecho un gran esfuerzo y vamos a seguir apostando por él pero necesitamos de la ayuda de la administración, porque nos jugamos el futuro de nuestras empresas y de la nuestra economía", según el responsable de Asucova.
Durante el periodo de confinamiento se ha producido un repunte de las contrataciones, derivados de la necesidad de reforzar las plantillas, pero la mayoría han tenido carácter temporal.
Desde mediados de marzo, cuando se declaró el estado de alarma, las cadenas de supermercados han contratado de media y por cadena entre 200 y 300 personas, y se han registrado, sobre todo hasta mediados de abril, unos índices de contratación similares a los crecimientos anuales. Estos nuevos contratos han sido temporales y a tiempo completo, y se han extraído de las bolsas de trabajo de los supermercados.
Se añade el empleo indirecto creado a través de proveedores de servicios, industria auxiliar y empresas de trabajo temporal, que en algunas empresas ha superado las 1.000 contrataciones.
En el caso de los trabajadores fijos de los súper, Reig ha recordado que han hecho "un esfuerzo extraordinario" y la mayoría de las empresas han acordado partidas extra de bonificaciones económicas para ellos.
En el estado de alarma las ventas han aumentado -un 15 % de media en valor- pero los costes derivados han crecido proporcionalmente y, de hecho, algunos operadores calculan entre un 20 y un 25 % de incremento de costes.
El margen neto se ha reducido, en algunos casos, un 90 % consecuencia del incremento de los costes y Reig ha asegurado que los supermercados "no se han enriquecido a costa de nadie".
Los supermercados siguen comprometidos con las donaciones, superiores a 500.000 kilos de productos en condiciones óptimas de consumo desde el inicio del estado de alarma hasta la semana pasada, y se continuará con las campañas en colaboración con Cruz Roja, los bancos de alimentos y los comedores sociales.