MURCIA. “Son muchos los problemas comunes que presentan los pacientes que acuden a nuestro servicio de urología. Los problemas al orinar, las infecciones y el cólico renal representan el mayor volumen de consultas”, destaca el doctor Francisco Sánchez, urólogo especializado en Urodinamia del Hospital IMED Valencia. Los problemas al orinar suelen agruparse tres grupos de pacientes: la incontinencia de orina, el aumento de la frecuencia con la que se orina durante el día o la noche y los que tienen que realizar esfuerzo para orinar. “Todas ellas presentan un elevado impacto en la calidad de vida y condicionan considerablemente las actividades cotidianas”, afirma el experto.
Otro problema común son las infecciones de orina repetidas, tanto en hombres como en mujeres, patología que es cada vez más frecuentes y obliga a la administración de antibióticos de manera repetida. “Afortunadamente, disponemos de novedosas alternativas que pueden evitar la repetición de las infecciones sin la necesidad de utilizar antibióticos para evitarlas”, señala el propio Dr. Sánchez.
Las piedras en la vía urinaria es otra dolencia habitual, que puede producir el temido y doloroso cólico nefrítico. “Un análisis detallado de las causas que originan la producción de estas piedras, la litotricia por ondas de choque o el tratamiento endoscópico con láser (sin necesidad de cirugía abierta) son las armas terapéuticas con las que tratamos y realizamos la prevención de los cálculos renales”, concluye el urólogo del Hospital IMED.
Diferentes enfermedades urológicas se manifiestan con síntomas prácticamente indistinguibles: la incontinencia urinaria puede estar producida por enfermedades neurológicas o farmacológicas, por la diabetes, o ser simplemente consecuencia de la edad. Asimismo, los problemas al vaciar la vejiga pueden ser igualmente consecuencia de prolapsos vaginales, enfermedades prostáticas o enfermedades neurológicas. Es por ello que en esta especialidad, la precisión del diagnóstico cobra una importancia especial
“El diagnóstico de las enfermedades relacionadas con el proceso de la micción son un verdadero reto para el profesional”, afirma el Dr. Francisco Sánchez. La urodinamia es la encargada de identificar el origen de los síntomas, cuantificar la magnitud del problema y orientar al tratamiento más apropiado en cada caso.
Las visitas al urólogo a partir de una determinada edad son altamente recomendables para adelantarnos a posibles patologías. “Abordar ciertas enfermedades urológicas en las fases iniciales de la enfermedad cuando aún no se ha mostrado y no hay signos que nos alarmen sobre su existencia, permite no sólo la curación de la enfermedad sino minimizar sus consecuencias” afirma el doctor.
El ejemplo más visible es el diagnóstico precoz del cáncer de próstata. “Se recomienda realizar un chequeo en pacientes con síntomas o con antecedentes familiares a partir de los 40 años y en todos los varones mayores de 50 años”, concluye el propio Dr. Sánchez.