O-stuff: botas intemporales que usan materiales reciclados desde el caucho a la piña

ELDA. La empresa de Elda O-stuff es la responsable de una marca que vende calzado -botas- con una máxima que pasa por la sostenibilidad y el uso de materiales y fabricación en el territorio para el apoyo de la economía local y unas condiciones laborales justas. Esta firma ofrece estos zapatos y, a la vez, con su labor, tratan de "ser consecuentes con nuestra forma de pensar y trasladar nuestra ideología a todos los aspectos de nuestra vida, sobre todo a las cosas que utilizamos en el día a día". 

Por eso, quieren transmitir esos valores a través de sus productos. En su fabricación tratan de ser respetuosos en la medida de lo posible con el medio ambiente y aspirara una economía circular "con coherencia y transparencia en lo que hacemos, siendo conscientes del impacto que producimos en nuestro entorno". 

Para ello, en el desarrollo de este calzado utilizan materiales reciclados, transformando los residuos en materia prima y "utilizando la tecnología más innovadora, junto con materiales de bajo impacto medio ambiental, respetuosos con los animales -no usamos ningún material de origen animal- y manteniendo la fabricación a mano de nuestros modelos". En definitiva, una suma con la que quieren conseguir unos diseños sostenibles, honestos y atemporales.

Su calzado está hecho a mano, que supone un incremento de capital humano y menos consumo energético de maquinaria, "fomentando la economía de cercanía y la sostenibilidad social". El polyester reciclado se usa para el cuerpo del calzado y el caucho natural reciclado para las suelas. Además, las plantillas extraíbles y forros están realizados en PET reciclado con textura de piel suave.

Otro de los originales materiales que usan está bautizado como "Piñatex", un cuero vegetal sostenible hecho con piña,  y que definen como "uno de esos productos raros, diseñado para golpear todos los botones de la sostenibilidad a la vez". Sustituye al cuero, que tiene un impacto ambiental y de bienestar más grande y "además, genera nuevos ingresos corrientes a los agricultores de subsistencia, lo que les permite utilizar plenamente sus cultivos". 

Estas botas, además, quieren fomentar un consumo responsable y el llamado Slow buy, es decir, la venta huyendo de compras compulsivas y pensando en una duración a largo plazo. Por este motivo, cada zapato se fabrica sobre pedido y se puede personalizar para los clientes. Además, pueden reducir gastos de almacenaje y la acumulación de stock innecesario y también suma a la producción un ahorro energético.

El proyecto está, además, dentro de La Network  "una red virtual para las personas, instituciones y comunidades emprendedoras comprometidas con nuestro territorio", y que ofrece la oportunidad de conectar con otras comunidades de personas emprendedoras, instituciones públicas y privadas, profesionales expertos y agentes del ecosistema que trabajan "para afrontar con resiliencia y respeto el desarrollo de esta tierra". La cercanía, es esencial en un plan que ha nacido para sumar fuerzas en el territorio, especialmente en la provincia de Alicante, tal y como suele ser sello de los proyectos de Genion.