CASTELLÓ. Representantes de las distintas fuerzas políticas que aspiran a la alcaldía de Castelló han aceptado la invitación de Patim para conocer en las propuestas políticas que la entidad castellonense plantea en el ámbito de las adicciones, empleo, voluntariado y violencia de género.
La implantación de salas de juego en el municipio, la gestión del voluntariado y la necesidad de reforzar las iniciativas municipales encaminadas a atender las necesidades de las personas que desde hace tiempo tienen un problema de abuso en el consumo de sustancias tóxicas han centrado buena parte de este diálogo con cada partido.
La Junta Directiva de la entidad ha mantenido encuentros individuales con las formaciones políticas. La coordinadora de programas, Inma Galmés, ha mostrado su preocupación por el incremento de operadoras de juego que han elegido Castelló para abrir sus negocios. “Resulta inquietante que en determinadas zonas del casco urbano se estén concentrando numerosos negocios de juego, debemos evitar que abran sus puertas cerca de centros educativos, instalaciones deportivas o en barrios con una población más vulnerable por sus condiciones sociolaborales”, afirma.
Una media a la que se suma la propuesta de prohibir la publicidad explícita sobre juego en todo el término municipal.
Galmés ha insistido en la conveniencia de rediseñar las actuales políticas sobre adicciones y cambiar el modelo de prevención implicando a los jóvenes en su construcción de respuestas de ocio alternativo. “Están fuera del circuito terapéutico los pacientes crónicos, aquellas personas que hace más de veinte años que consumen drogas y que, en muchos casos, han pasado una etapa de su vida en centros penitenciarios”, apunta el presidente de Patim.
Entre las nuevas respuestas ante las adicciones, Patim requiere la participación del Ayuntamiento a la hora de promover un debate público y constructivo sobre la regulación y legalización de terminadas drogas y sus usos terapéuticos. “Hemos de ser valientes y dejar de ser espectadores de piedra de un diálogo que está en la calle y ante el que se están empezando a tomar medidas en otros países”, sentencia Francisco López Segarra.
Inma Galmés considera que uno de los retos a corto plazo por parte del Ayuntamiento es finalizar la redacción de un Plan Municipal de Voluntariado, en colaboración con las entidades del Tercer Sector, y crear una Agencia Municipal del Voluntariado para gestionar, formar y poner en valor esta figura. “Se trataría de un servicio en el que cualquier persona podría recibir información, asesorarse y tramitar su acción de voluntariado –explica- e incluso certificar las competencias adquiridas, en colaboración con las organizaciones destinatarias”.