VALÈNCIA. Tres a uno es la relación del tiempo del que gozaron en las pantallas de À Punt el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y la vicepresidenta, Mónica Oltra, respectivamente. O lo que es lo mismo: por cada tres minutos que salió el rostro del president, la vicepresidenta lo hizo uno. Son datos ofrecidos por la auditora externa GFK sobre los programas informativos durante el primer trimestre de 2019, antes de que diera inicio la campaña electoral para los comicios autonómicos celebrados el 28 de abril.
Se trata del examen a uno de los 18 ítems fijados en el contrato programa suscrito entre el gobierno valenciano y la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación (CVMC): el pluralismo político y social en los medios públicos valencianos. Así, el minucioso informe de la auditora, al que ha tenido acceso este diario, arroja información valiosa a la hora de analizar el tratamiento informativo de À Punt, al menos durante estos meses.
Por ejemplo, en cuanto a los personajes políticos, el documento señala que Ximo Puig fue el que más salió hablando en los programas informativos de la casa, tanto en número de apariciones como en tiempo medido en minutos. Concretamente, en la televisión, lo hizo en 78 ocasiones y durante un total de 22:28 minutos. En términos relativos, se llevó el 10,1% de la cuota de apariciones y tres veces más que Mónica Oltra, con el 3,3% de la cuota (7:17 minutos y 35 apariciones).
Si el primero fue Puig, la segunda fue la líder de la oposición en la Comunitat Valenciana, la presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, con 8:45 minutos y 41 intervenciones en estos programas (3,9%). Le siguió, en tercera posición, el dirigente popular a nivel estatal, Pablo Casado, con datos similares. Oltra se situó por detrás de ambos.
El documento que evalúa la ejecución del contrato programa suscrito entre el Consell y la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación (CVMC) señala que sólo se han producido tres incumplimientos para un total de 18 ítems analizados. El examen sobre el primer año de emisiones que ha validado la comisión mixta Gobierno-CVMC y que se remitirá a las Cortes Valencianas, valora bastante positivamente el
Son recurrentes las críticas a los medios de comunicación, en especial a las televisiones, por el tratamiento y el enfoque de la información política. Y uno de los criterios de análisis al que se suele acudir es la utilización de las fuentes: quién sale, cuánto sale, e incluso cómo sale en antena. Es por ello que en la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació, que gestiona la radiotelevisión pública À Punt, se fijó unos objetivos de cumplimiento, entre los cuales estaba asegurar el pluralismo político y social en sus informativos. Y para examinarlo contrató una auditoría externa
El momento más visto fue la bajada de la Senyera con un 20,4% de cuota de pantalla, donde À Punt lideró la audiencia por delante del resto de cadenas.