VALÈNCIA. La Conselleria de Hacienda ultima cambios en su segundo escalón. Coincidiendo con el ecuador de la legislatura, el departamento que dirige Vicent Soler prepara desde hace semanas la renovación de varios altos cargos, una batería de nombramientos que se iba a llevar a cabo de una sola vez pero que se desencadenó este miércoles con el adiós de la subsecretaria de esta conselleria.
Tras dos etapas diferentes en la Conselleria de Economía y posteriormente en la de Hacienda, Cristina Moreno abandona la Generalitat y pone rumbo a Madrid para situarse al frente de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (Seittsa) en sustitución del alicantino Julián López, que regresa a la universidad.
De esta manera, Moreno, quien tomará el mando en una empresa dependiente del Ministerio de Transporte que dirige el también valenciano José Luis Ábalos, deja una plaza vacante en la Conselleria de Hacienda que ya ha tenido varios dueños desde que la izquierda comenzara a gobernar en 2015.
Así, el conseller Soler estrenará en breve un nuevo subsecretario, el quinto desde que cogiera la batuta de la siempre complicada Conselleria de Hacienda. Desde entonces, han pasado por el cargo Manuel López Estornell, Eva Martínez, Zulima Pérez y la citada Cristina Moreno. Las quinielas que circulaban este miércoles por el Gobierno valenciano apuntaban a que el nuevo inquilino del puesto podría ser Daniel González Serisola, actual jefe de Gabinete del conseller.
Una maniobra que entraría dentro de la lógica dada la especial complejidad de este departamento, lo que suele conllevar un tiempo de adaptación más amplio que el de otras consellerias. El valor de 'ser de la casa' suele incrementar las posibilidad de buscar soluciones dentro de la propia área.
Aplicando este mismo axioma, fuentes socialistas apuntan a que el puesto que dejaría libre González Serisola podría ser cubierto a través de un ascenso dentro de la propia conselleria. Así, para esa misión se especula con la incorporación de la exdiputada y ahora asesora de asuntos generales Clara Tirado.
Otro de los cambios pendientes en el segundo escalón es la salida de Juan Pérez como responsable de la Dirección General de Financiación Autonómica. En este caso se trata de un cambio acordado desde el momento de su nombramiento en 2019. El regreso de Pérez a su puesto de investigador del Ivie, de donde salió en excedencia para ser el primer responsable de la recién creada Dirección General de Financiación Autonómica, está pendiente desde 2020, pero primero la pandemia y posteriormente el encargo del conseller Soler para diseñar todo el engranaje normativo de las ayudas relacionadas con la covid le han mantenido en su puesto hasta ahora.
Pese a que la falta de iniciativa del Gobierno central para buscar un acuerdo político que permitiera abordar la reforma pendiente del modelo de financiación le ha impedido llevar a cabo su cometido inicial, el paso de Juan Pérez por esa dirección general sí ha permitido preparar y engrasar la estructura para cuando llegue el momento de esa reforma.
Además de reforzar el personal de este departamento, ha impulsado la creación de dos nuevos servicios, uno de ellos para la realización desde la Comunitat Valenciana de análisis y estudios relacionados con la financiación de las CCAA.
En su última etapa ha estado centrado en la preparación de los decretos recientemente aprobados para la concesión de las ayudas directas del Plan Resistir +, dotado con recursos que el Estado transfiere a las CCAA, que serán las encargadas de gestionarlas y certificarlas. En el caso de la Comunitat, se inyectarán 647 millones de euros para aportar liquidez a empresas y autónomos.
Su salida de la Generalitat no tiene fecha cerrada porque depende fundamentalmente de que se le encuentre un relevo para esa dirección general, pero previsiblemente se materializará en pocos días.