VALÈNCIA (EP). El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha instado este lunes al líder del PP, Pablo Casado, y al jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, a aclarar qué postura adoptarán tras las próximas elecciones en el caso de que estén en la oposición, si apoyarán a quien gobierne o "bloquearán".
En declaraciones a laSexta, recogidas por Europa Press, Rivera ha dicho que si Cs gana los comicios del 10 de noviembre, liderará "un gobierno que dialogue con la oposición". Y "si el PSOE gobierna y nosotros estamos en la oposición, yo me comprometo a remar en la misma dirección en estos diez asuntos de Estado", ha asegurado en referencia al decálogo que presentó en un acto electoral el pasado sábado.
"Es un compromiso firme, claro y nítido antes de ir a votar y me gustaría escuchar a Sánchez, en vez de criticar a los que proponemos acuerdos o consensos, escuchar y hablar de aquellos puntos que nos unen. Y a Casado me gustaría también sumarle y que se uniera, no simplemente pensar en las coaliciones o en las marcas", ha manifestado.
El líder de Ciudadanos considera que lo que quieren saber los españoles en la campaña electoral no es solo quién va a ganar en las urnas, sino qué va a hacer cada partido después. "No escucho a Sánchez ni a Casado decir 'si gobernamos, gobernaremos, y si estamos en la oposición, no bloquearemos'", ha insistido.
Además, ha dejado claro que el objetivo del "gran acuerdo nacional" que plantea Cs no es repartirse los puestos en el Ejecutivo, sino que Gobierno y oposición trabajen juntos para "desbloquear el país y hacer reformas".
"A mí no me interesan los sillones del Gobierno si estoy en la oposición, pero lo que no puedo hacer es bloquear el país otra vez", ha indicado, garantizando a los electores que con el voto a la formación naranja, "el país se pone en marcha".
Ante las críticas de Casado, que se ha preguntado por qué Ciudadanos no pactó antes con el candidato socialista para evitar unas nuevas elecciones en noviembre, Rivera ha replicado que el líder 'popular' ha hablado "muy poco del futuro" porque se ha centrado en "reconstruir la derecha", debatir sobre el aborto, defender la coalición España Suma y contar escaños.
Para justificar que no hubiera un acuerdo entre el PSOE y Cs para la investidura de Sánchez cuando juntos sumaban mayoría absoluta, Rivera ha afirmado que Sánchez "no quiso llegar a un acuerdo con Ciudadanos" y siempre decía que su socio preferente era Unidas Podemos.
Cuando quedó claro que con Podemos no habría acuerdo, "llamé a Sánchez y a Casado" para proponer una "solución de Estado" --ofrecer la abstención de Cs a cambio de unas exigencias sobre Cataluña, el Gobierno de Navarra y la política económica--, pero el líder socialista "no quiso ni escucharla", ha lamentado.
Sin embargo, cree que ahora es el momento de "los grandes acuerdos, la cesión, la negociación y el trabajo conjunto", y que los partidos que representan "un espacio constitucional y moderado" tienen que sumar.
"La política española tiene que estar a la altura de la sociedad civil y hoy no lo está", ha manifestado, añadiendo que él es "el primero siempre en hacer autocrítica". En este contexto, ha recordado que tras las elecciones anteriores Cs cumplió su promesa de no hacer presidente a Sánchez, pero ahora no se puede "obviar lo que está pasando", y es que "los españoles quieren desbloqueo y también reformas".
Asimismo, el líder del partido naranja ha negado que su discurso de ahora represente un cambio respecto a lo que decía antes, puesto que ya propuso a Sánchez acuerdos de Estado en distintos temas tras los comicios del 28 de abril. "No nos hizo ni caso", ha agregado.
Ahora siguen pidiendo al presidente del Gobierno en funciones que "rectifique", que "abandone a sus socios separatistas" y "vuelva al constitucionalismo" con el PP y Cs. Por ello, le ha pedido que el PSC apoye la moción de censura al presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, porque "no es compatible Ahora España" (el lema de campaña del PSOE) "con Ahora Torra".
Por último, Rivera ha evitado aclarar si se plantearía dimitir ante un mal resultado de Ciudadanos en las urnas. "Si yo me hubiera apartado de una carrera electoral cuando las encuestas no eran buenas, ni gobernaríamos en Andalucía, ni hubiéramos ganado las elecciones en Cataluña, ni tendríamos 57 escaños", ha afirmado.
Eso sí, ha admitido que el riesgo para muchos partidos, pero "especialmente para Cs", es que la gente "se harte" y el 10 de noviembre haya una alta abstención. Por eso, ha animado a "los moderados, los liberales y las clases medias" a movilizarse e