VALÈNCIA. (EP) El sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) cree que la Comunitat Valenciana tiene "margen suficiente" para incorporar impuestos propios: nuevos escalones en el IRPF para las grandes compañías que "obtienen beneficios incluso en medio de la pandemia" y las fortunas que mantienen su nivel de renta.
Así lo ha destacado el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, tras conocer la propuesta de reforma fiscal de Compromís, coalición que gobierna en la Comunitat junto a PSPV y Unides Podem.
Tras la reunión en Les Corts, el técnico de Hacienda ha valorado positivamente las medidas porque van en la línea del plan que España ha enviado a Bruselas para 2021. "Dentro de la capacidad normativa de la Comunitat, podrían establecerse nuevos escalones en el gravamen del IRPF: es posible y da una gran capacidad recaudatoria", ha aseverado.
Según los cálculos de Gestha, esta subida no llegaría al 0,6% de los valencianos, unos 13.000 que declaran más de 120.000 euros y que aportan en conjunto hasta el 14% de la recaudación de la Comunitat.
Por tanto, a su juicio, tendría un potencial recaudatorio importante y no supondría una fuga de capitales a otras comunidades. "Una persona no se muda por una razón fiscal: ahí está su núcleo de intereses familiares, amistades y su negocio", ha apuntado, para poner como ejemplo la subida de impuestos en Francia en la anterior crisis que "la mayoría de grandes fortunas pagó gustosamente".
Sobre la política fiscal de Madrid, el representante de Gestha ha sostenido que puede generar una tendencia en otras autonomías a bajar impuestos, como pasó sobre todo con el de sucesiones y donaciones. "La Comunidad de Madrid está perdiendo 970 millones al año por no hacer tributar a las personas que tienen más de dos millones de patrimonio individual", ha estimado.
Esta bonificación al 99%, para los técnicos de Hacienda, supone "una anomalía gracias al sistema de financiación de Madrid y a su efecto capitalidad: al estar radicadas las mayores empresas, allí se pagan las mejores retribuciones". Eso sí, "no es la realidad social media del país", ha remarcado.
Gestha no cree que esto pueda generar una atracción de empresas a la capital, como tampoco que la Comunitat se haya beneficiado del traslado de sedes desde Cataluña hace tres años por la incertidumbre política: "El impuesto de sociedades llega íntegro a las arcas estatales. Ni Cataluña perdió financiación ni la Generalitat Valenciana la ha obtenido por el cambio de domicilio social.
Por parte de Compromís, su síndic, Fran Ferri, ha destacado la "sintonía" de Gestha con su propuesta de reforma fiscal, sin "ningún impuesto imposible o inconcebible", y ha agradecido sus aportaciones técnicas para afinar las medidas, como no gravar a los zumos que contengan solo azúcar presente en la fruta en el impuesto para las bebidas azucaradas.
En todo caso, la coalición cree que estos cambios se deberían "cuadrar con lo que diga el Estado", ante la intención del Gobierno de impulsar una reforma similar, y que "debe ser un pacto 'botánico' como siempre", pactado por el gobierno del Botànic con PSPV y Unides Podem.
"De momento no hay un 'no' rotundo, están todas las opciones sobre la mesa y se debatirán una a una", ha garantizado Ferri cuando quedan dos semanas para presentar el proyecto de presupuestos de la Generalitat para 2021. Y ha recalcado que "hasta que nadie diga lo contrario", el Botànic mantiene su presentación conjunta de enmiendas al debate de las cuentas, como acordaron los síndics.
También ha sostenido que Cs podría apoyar la reforma fiscal de Compromís porque "siempre ha estado en contra de subir impuestos a las clases medias y bajas". "Ciudadanos debe ser un gran seguidor del FMI y le podrá hacer caso de que no va en detrimento del crecimiento, al contrario", ha subrayado.