Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Calles vacías y persianas de comercios bajadas. Esta es la imagen de todas las ciudades españolas desde que el pasado sábado 14 de marzo el Consejo de Ministros decretara el estado de alarma para evitar más contagios por coronavirus. Las consecuencias económicas y sociales desde entonces no han dejado de sucederse: ERTE en empresas de distintos sectores, suspensión de clases, aplazamiento de la Selectividad, cierre de cementerios y velatorios públicos a los fallecidos por esta pandemia en algunos puntos del país o el aplazamiento de los Juegos Olímpicos de 2020, son algunas e ellas.
Con las ciudades prácticamente paralizadas y la circulación limitada, las estaciones de tren también se han transformado en lugares fantasma. El nivel de ocupación en trenes AVE y larga distancia se sitúa por debajo del 5%, lo que significa que la caída del número de pasajeros es superior al 95%. Unas cifras que motivaron este martes a que la secretaria general de Transportes, María José Rallo, instara a las comunidades autónomas a que ajustaran más la oferta de desplazamientos a la adaptación que ya realizaron la semana pasada.
En el caso de la Comunidad Valenciana, el AVE que realiza el trayecto Valencia-Madrid y viceversa, en un periodo normal realiza un total de 17 desplazamientos por sentido. Sin embargo, desde el pasado lunes 16 de marzo el número de viajeros se ha reducido considerablemente, lo que obligó a Renfe la semana pasada a rebajar a 7 el total de trenes ofrecidos por sentido diario. De estos, la compañía tan sólo podía vender un tercio de los billetes para cumplir con las recomendaciones sanitarias -cada AVE cuenta con 350 plazas-.
Sin embargo, a partir del próximo lunes 29 de marzo y siguiendo la última sugerencia de Rallo, el AVE Valencia-Madrid tan solo realizará 3 desplazamientos por sentido cada día. Una oferta con la que pretenden para garantizar los movimientos de quienes tienen que desplazarse por fuerzas de causa mayor, pero al mismo tiempo "preservar" la salud de los trabajadores que prestan el servicio de estos transportes básicos.
En el caso de Cercanías, las cifras no serán mucho mayores; al menos en lo que respecta a Valencia. Fuentes de Renfe aseguran que durante la semana pasada el número de viajeros en Cercanías se redujo entre un 75% y un 80%. Sin embargo, el descenso fue progresivo hasta que este lunes la cifra de pasajeros se situó en torno al 4%. "Tenemos una media de 54.000 viajeros diarios y ahora estamos en torno a 1.000 y 1.300 al día como máximo", explicaron a Castellón Plaza.
A las restricciones que se aplicarán en el AVE, se suman los cambios en Cercanías que se adoptarán también a partir de la próxima semana. Estos implicarán que en la hora punta en Valencia tan solo se mantendrá el 70% de la oferta en hora punta y se reducirá a un 50% en hora valle.
Las horas punta en el Cercanías del núcleo de Valencia son las siguientes: 6:30, 9:30, 13:30, 15:30, 18:30 y 20:30.
