CASTELLÓ. El centrocampista del Villarreal Manu Trigueros destacó este lunes la reacción protagonizada por el equipo castellonense en la recta final de la primera vuelta de Liga y la forma en la que se había producido.
"Ya hace un tiempo que el equipo había cambiado su línea de juego, estamos más sólidos y más seguros y eso nos está llevando a ganar partidos. Ahora el equipo tiene más confianza, vemos que a los rivales les cuesta hacernos daño y eso nos da mucha tranquilidad", dijo ante los medios.
Asimismo, Trigueros destacó que el equipo abrirá la segunda vuelta "cerca de Europa", el objetivo que buscaban. "Hemos estado en tierra de nadie y hemos pasado por un mal momento, pero hemos sabido reaccionar", indicó.
En ese sentido, Trigueros realzó el mérito que tiene que el equipo superase esa racha y el escenario en el que se produjo al sumar victorias en "campos complicados y con equipos que estaban en un gran momento de forma", lo que les lleva a pensar que pueden "aspirar a estar ahí con ellos".
"Salimos a competir en todos y a correr, con la idea de que al equipo rival le cueste ganar, que vean que les cuesta mucho sacar los puntos. Sabemos que arriba tenemos mucha calidad y si nos asociamos bien llegan las jugadas y el peligro en la portería rival", añadió en su análisis del equipo.
Personalmente, recordó que llevaba mucho tiempo sin marcar, por lo que el tanto ante la Real Sociedad en el último partido de la primera vuelta le ha dado "mucha confianza y tranquilidad", además de ayudarle a "dejar atrás todo lo que pasé el año anterior".
"La verdad es que me siento bien, estoy jugado y el equipo está ganando, por lo que ahora mismo poco más puedo pedir", apuntó Trigueros, quien recordó que ha sido padre hace poco y está pasando por "un gran momento, tanto en lo personal como en lo profesional".
"Es verdad eso que dicen que los niños vienen con un pan debajo de brazo, y mi hija ha venido con uno muy grande", concluyó.