VALÈNCIA. El Valencia retoma la disputa de su Torneo estival, el Naranja. El fútbol moderno se llevó por delante aquella entrañable fórmula de los triangulares que acababan siendo una excusa para encontrar a muchas familias valencianistas yendo juntas al estadio a disfrutar de su bocadillo y un refresco, cuando probablemente ya no volverían a hacerlo en el resto del año.
Para esta edición 49 tampoco se contemplan ya aquellos fastos con presentación de los futbolistas uno a uno con "aplausómetro" en la grada como premio a lo hecho en la temporada anterior. Vistos los dos agujeros en el currículum del club perpetrados por quienes mandan, sería un trance demasiado desagradable para los futbolistas.
Y por supuesto, que ni que decir tiene que tampoco servirá este trofeo para ver las novedades (en plural) de la plantilla como solía ocurrir cada año en el partido de presentación a la espera de la guinda de la plantilla en los últimos días antes de comenzar la liga. Nada de eso ya existe.
Hoy volverá a jugarse el Trofeo Naranja tras un año sin hacerlo por culpa del COVID, y además lo hará con poco publico debido a las restricciones sanitarias y a los precios impuestos por Anil Murthy.
En su lucha por evitar lo que más tarde acabará ocurriendo sí o sí -que Mestalla se llene un día y les explique a los actuales rectores de la entidad lo que piensa de ellos- el presidente del club duplicó el precio de las entradas para el partido (situación que ya avanzó en su día en una conferencia para su país, pese a que sus lacayos corrieron a negar la realidad). Así que, dado que el club tampoco ofrece información alguna sobre el número de entradas vendidas, todo apunta a una entrada ínfima para el partido.
Los atractivos del encuentro por parte valencianista son fácilmente identificables y no por popularidad o importancia, sino por número. Sólo hay dos: el entrenador José Bordalás y el central Omar Alderete. No hay nada más -en cuanto a diferencias con el año pasado- que llevarse a la boca. Es lo que hay.
Queda algún apunte más como por ejemplo la lucha entre Rivero y Mamardashvili, o el asentamiento de Hugo Guillamón en la posición de medio centro ante la ausencia de efectivos en dicho lugar del campo.
Por lo demás, queda por ver el Milán. No porque el antaño rey de Europa sea el equipo más atractivo del continentes, sino porque desde 2019 la grada de Mestalla no disfruta de la visión de un equipo europeo, y al paso que va la cosa no parece muy arriesgado aventurar que la travesía va a ser larga.
Si Bordalás decidiera ir con todo para el penúltimo ensayo estival el once podría ser el compuesto por Rivero o Mamardashvili en defensa, Correia, Gabriel, Alderete y Gayà en la zaga, Guillamón y Racic (si llega, ya que el club no emite partes médicos), Jeison y Cheryshev en las bandas y arriba Guedes y Maxi.
PARTIDO: Valencia CF-AC Milán.
HORA: 20´30 horas (desde las 20 horas en El Matx de Plaza Radio).
ESTADIO: Mestalla.
