CASTELLÓ (EP). Adif ha aprobado una nueva inversión, superior a los 30 millones de euros, para seguir impulsando la transformación global de la línea Zaragoza-Teruel-Sagunt. Esta actuación, adjudicada en la última reunión del Consejo de Administración de Adif, permitirá implementar nuevos sistemas de gestión del tráfico para aumentar la capacidad de circulación de la línea, ha informado la compañía pública.
Con una longitud de 311 kilómetros, este trazado es "estratégico" por su ubicación geográfica para la conexión por ferrocarril entre el Mediterráneo y el Cantábrico, ha explicado Adif en una nota de prensa, en la que ha precisado que discurre por territorios "de gran potencial socioeconómico" y que representan el 21% del PIB del Estado, conectando con las importantes áreas portuarias de València y Bilbao y nodos logísticos como Platea en Teruel, Zaragoza-Plaza o Júndiz, en Vitoria.
El desarrollo del Plan Director de esta línea, con un presupuesto global de alrededor de 450 millones de euros, es uno de los compromisos que está cumpliendo el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), tal y como se refleja en la inversión movilizada hasta la fecha, que asciende a casi 290 millones de euros, entre obras ya ejecutadas, en ejecución, en fase de contratación y otras actuaciones en proceso de redacción y supervisión de proyectos, han apuntado desde el ministerio. El objetivo del Plan es mejorar "de forma significativa" el estado de la infraestructura actual para seguir potenciando el tramo Zaragoza-Teruel-Sagunt, especialmente para el tráfico de mercancías permitiendo la circulación de trenes de 750 metros.
Las citadas fuentes han indicado que los principales beneficios una vez completado el Plan Director serán una mayor capacidad de tráficos; reducción de forma sustancial los tiempos de viaje, tanto para los viajeros, como para las mercancías; mejorar la competitividad de los servicios de carga; reducir los costes para los operadores y mayor capacidad de carga y de tracción.
También habrá otras ventajas, como el incremento de las velocidades de circulación; el aumento en la eficiencia en el transporte; la incorporación de trenes eléctricos; la reducción de las emisiones contaminantes y de la huella de carbono; mejores parámetros de fiabilidad y confort; reducción de la probabilidad de incidencias, y que será plenamente interoperable.
Asimismo, hará posible que esta línea obtenga los mismos parámetros que otras infraestructuras de altas prestaciones, tanto a nivel nacional como internacional, como la electrificación a 25 kV o apartaderos de 750 metros.
Adif ha señalado que el nuevo sistema que se implementará (Bloqueo Automático en Vía Única) posibilitará aumentar la capacidad de circulación, al poder expedirse más de un tren entre dos estaciones, lo que representa multiplicar el volumen de tráficos respecto al actual sistema que solo permite el paso de un tren.
Para eso, se adecuarán los enclavamientos en estaciones, se instalarán nuevas señales y balizas del sistema ASFA digital (Anuncio de Señales y Frenado Automático), se eliminarán las posibles afecciones a la electrificación a 25 kV, se ampliará la red de fibra óptica y se actualizarán de los Centros de Regulación de Tráfico de València-Font de Sant Lluís y Zaragoza a la futura configuración.
El contrato para la ejecución de estas obras en el tramo Bifurcación Teruel (salida de Zaragoza hacia el sur)-Caminreal ha sido adjudicado a la empresa Siemens Rail Automation, con un plazo de ejecución de 18 meses y un presupuesto de 30.077.606 euros. Por otro lado, está próximo a adjudicarse la instalación del mismo equipamiento en el tramo entre Caminreal y Sagunt.
Hasta la fecha, y como obras más relevantes, se ha finalizado la instalación del sistema tren-tierra, la renovación de la superestructura de vía (carril y traviesas), las obras en estructuras para el aumento de carga por eje hasta las 22,5 toneladas, así como la eliminación de 18 Limitaciones Temporales de Velocidad.
Entre las actuaciones actualmente en marcha, destaca el reciente inicio de la electrificación del tramo Bifurcación Teruel (Zaragoza)-Caminreal-Estación de Teruel, mientras que el tramo Teruel-Sagunt está pendiente de la Declaración de Impacto Ambiental.
Por otro lado, se están ultimando los trabajos de los nuevos apartaderos de 750 metros en las estaciones Estivella-Albalat, Navajas, Barracas, La Puebla de Valverde, Teruel, Ferreruela y Cariñena, en cuya financiación participa la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) a través el Fondo Financiero de Accesibilidad Terrestre Portuaria, y Adif ha iniciado el proceso necesario para obtener las autorizaciones de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF) para la puesta en servicio de dichos apartaderos.
En este sentido, próximamente se licitarán las obras de la nueva vía de estacionamiento para trenes de mercancías de 750 metros en la estación de Cella, que dará conexión con el polígono Platea, en las proximidades de la capital turolense. A lo largo de este año, se licitarán además las obras para adecuar las dimensiones de 19 túneles y 44 pasos superiores a las características del futuro sistema de electrificación.
También está previsto licitar próximamente el proyecto de actuaciones complementarias entre Teruel y Sagunt, que incluye obras de mejora de drenajes y cunetas, sustitución de traviesas y operaciones en la capa de balasto en vías de apartado y puntos determinados de trayectos, junto con el carril, limpieza de cruces de acequias y renovación de dos tramos metálicos.
Además, se están redactando los proyectos para la supresión de los pasos a nivel situados en Jérica y Teruel, los dos únicos que existen actualmente en la línea.