Adif pretende licitar la obra del Corredor Mediterráneo de Castellón a Vandellós en un mes

CASTELLÓN. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) tiene la intención de sacar a concurso las obras para implantar el ancho internacional en el tramo que va de Castellón a Vandellós, uno de los más atrasados de todo el recorrido hasta la frontera francesa, en alrededor de un mes. Así lo ha podido constatar Castellón Plaza de fuentes conocedoras, aunque oficialmente desde la entidad que depende de Fomento no quieren todavía hablar de plazos. 

Con ello se dará un impulso clave a una obra que ha sufrido numerosos avatares en forma de cambio de proyecto. La última modificación establece el retorno al proyecto original: el cambio del ancho ibérico en las dos vías existentes al internacional. Esto obedece a "criterios técnicos", apuntan las fuentes, motivo por el cual se ha desestimado la implantación del ancho mixto en una de las vías, tal y como solicitaron las empresas de transporte y el puerto de Castellón y llegó a valorar la Administración central, hasta el punto de dar a conocer en su día un proyecto que así lo contemplaba. 

Detrás del cambio de criterio pueden estar así los problemas que Adif se está encontrando en la implantación del tercer carril entre València y Castellón y la necesidad de elevar la velocidad de los trenes entre la capital de la Plana y Vandellós para cumplir los horarios comprometidos para el transporte de pasajeros, como señala el presidente de la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas, Pedro Coca. 

Obras más sencillas

Lo cierto es que con la vuelta al proyecto original, las actividades constructivas son mucho más simples. Dado que este tramo ya cuenta con traviesas polivalentes, tan solo será necesario cambiar la ubicación de uno de los dos carriles que a día de hoy conforman cada vía para ejecutar la variación del ancho al estándar europeo. La principal complicación está en los desvíos a la entrada y la salida de la estación de Castellón y en los apartaderos para trenes de 750 metros que se deben construir en los 147 kilómetros de su recorrido. Esta misma semana Adif Alta Velocidad ha sacado a concurso por 3,2 millones el suministro de traviesas para este fin y el pasado verano licitó el de balasto. 

Asimismo, el cambio de ubicación de la catenaria y las mejoras en los sistemas de comunicaciones y señalización también conllevarán su dificultad, pero sin duda los trabajos en los dos tramos (Castellón-Vinaròs y Vinaròs-Vandellós) no tendrán nada que ver con la odisea para implantar el tercer carril que se vive entre la capital autonómica y la de la Plana.