CASTELLÓ. El rendimiento de Albert Lottin desde su llegada al Castellón es una de las mejores cosas que le han pasado al equipo de la Plana en las últimas semanas. Y una de las más sorprendentes.
Y es que el francocamerunés se incorporó fuera de mercado, el 21 de febrero, tras estar un mes sin equipo –en enero rescindió con el Panachaiki, equipo del furgón de cola de la segunda división griega- y no partía con grandes opciones de aportar de forma inmediata a la causa albinegra.
Sin embargo, el ex jugador de la cantera del Girondins de Burdeos se adaptó a las exigencias de Dick Schreuder y se convirtió, con mucha rapidez, en una pieza clave en el centro del campo albinegro, demostrando además una calidad superior a la categoría en la que milita.
Tras debutar frente al Atlético Baleares apenas cuatro días después de fichar -jugó los minutos de descuento ante el Atlético Baleares-, Lottin dispuso de su primera titularidad el 16 de marzo, frente al Córdoba, realizando un buen partido en los 90 minutos que estuvo en el terreno de juego. Desde entonces no ha dejado de formar parte del once inicial, encadenando cuatro partidos de titular en los que ha dado solidez y equilibrio a la medular castellonense.
En el más reciente, frente al Intercity, ha sido el más destacado del Castellón según las votaciones de sus aficionados. Se trata de un salto enorme en su carrera después de una escasa participación en su anterior club, donde jugó siete partidos antes de rescindir. Luego estuvo casi dos meses sin club y ahora es un pilar del equipo que lidera el grupo 2 de Primera Federación
El mediocentro de 22 años no ha tardado en convencer al entrenador del Castellón, que ya le ha hecho jugar de inicio en cuatro partidos seguidos. Quizás convenza también a Bob Voulgaris para que prolongue su contrato, que expira el 30 de junio de este año.
