CASTELLÓ. El alcalde de Alcalà-Alcossebre, Francisco Juan, aprovechó la visita institucional de la Subdelegada del Gobierno en Castellón, Antonia García Valls, a la localidad, para trasladarle la necesidad de que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y el Ministerio de Transición Ecológica adopten medidas urgentes para garantizar la seguridad en la desembocadura del río San Miguel, en Capicorb.
En esa zona, competencia de la CHJ, ha subido mucho el nivel del cauce, debido al arrastre y depósito de materiales, y esto, en el caso que se produzcan lluvias de consideración, provoca el desbordamiento del río. Esto fue lo que sucedió el pasado 31 de octubre, cuando la subida del río provocó la inundación de viviendas y urbanizaciones, teniendo que ser necesario el rescate en helicóptero de 16 personas. Además, se produjeron importantes daños en el camino L'Atall, cuyas reparaciones ha ejecutado de emergencia el Ayuntamiento, con el fin de garantizar la seguridad de los vecinos.
El alcalde trasladó a la Subdelegada que "esto no es la primera vez que lo solicitamos, tanto el Ayuntamiento como la Asociación de Vecinos de Capicorb, por lo que insistimos en que se estudien y ejecuten actuaciones técnicas, por parte de los organismos que son competentes, para garantizar la seguridad de las infraestructuras y sobre todo de las personas".