VILA-REAL (EFE). El entrenador del Villarreal B, Miguel Álvarez, manifestó este viernes que en el vestuario no hablan de la clasificación tras la dura derrota de la pasada jornada ante el Real Zaragoza, ya que la Segunda División es "muy larga" y por ello se centran en el "día a día"
“No hablamos de la clasificación, ni cuando estábamos con distancia ni ahora, sabemos que tenemos un camino que recorrer y un objetivo muy claro. Esto es una maratón, una carrera de largo recorrido, y por ello somos conscientes de la dificultad”, manifestó este viernes Álvarez.
Sobre su próximo rival, el Lugo, el técnico del filial villarrealense apuntó que “es un rival complicado que cuenta con muy buenos jugadores de mediocampo, que arriba tiene un futbolista desequilibrante, como es Cristian Ramos, y suman futbolistas peligrosos en banda”.
“El último partido en casa ganaron al Granada, ahora vienen de perder fuera, pero está claro que en casa se hacen fuertes. Es lo que buscamos todos los equipos ahora, sabemos que los partidos que quedan de local son vitales para la clasificación”, agregó.
Por último, Álvarez destacó que esta semana de trabajo ha ido "fenomenal" y que no tiene ninguna queja del esfuerzo que vienen haciendo los jugadores pese a la última derrota.
“Creo que ellos entienden que un resultado positivo o negativo no nos tiene que sacar de lo que es nuestro trabajo como equipo y de la idea de juego y de crecimiento. A nivel personal, reconozco que fue mi día más desafortunado para poder ayudar a los chicos en nuestro debut en la Cerámica”, finalizó. EFE