Fotos: CARLOS PASCUALVALÈNCIA. La 39ª edición de Cevisama ya está en marcha. Marcada por el contexto de dificultad que atraviesa el sector, la feria internacional de la cerámica y el baño ha vuelto este lunes tras dos años de ausencia con la esperanza de convertirse en un revulsivo para las empresas y con la intención de pasar la reválida que le garantice su continuidad.
El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha sido el encargado de inaugurar el evento. En su discurso inaugural, Puig ha destacado que Cevisama "es una plataforma extraordinaria para concentrar las acciones del sector y Feria Valencia tiene que ser también una plataforma para todos los sectores económicos de la Comunitat". En el mismo sentido, el presidente de la patronal autonómica CEV y presidente del comité ejecutivo de Cevisama, Salvador Navarro, ha hecho incidencia en que Cevisama "es una feria indiscutible fruto del saber hacer de Feria Valencia".
El jefe del Consell ha remarcado la "situación compleja" que la principal industria castellonense viene atravesando y ha apelado al "papel de las administraciones" para tratar de aportarle oxígeno: "Tenemos que ser capaces de darle al sector lo que necesita", ha señalado.
En esta coyuntura, Puig ha lanzado también una puya a la Comisión Europea, que con sus requisitos de reducción de emisiones ha puesto entre la espada y la pared a la industria cerámica continental: "La sostenibilidad tiene que ser justa, que no ate al sector del pies y manos".
Con todo ello, la feria española de la cerámica ha regresado este lunes tras la ausencia derivada de la pandemia de covid y la incertidumbre que, debido al alza de costes energéticos, hizo ya el año pasado que se suspendiera. Nueve pabellones de dos niveles de Feria Valencia están ya ocupados -sobre todo- por algunos de los principales fabricantes de pavimento y revestimiento cerámico, pero también por firmas de maquinaria cerámica, la piedra natural, complementos de baño y elementos constructivos.
En los pasillos, el frío es notable y acentúa la sensación que deja la ausencia de algunas de las principales marcas del clúster castellonense, entre ellas las esmalteras, de las que ninguna ha acudido al certamen. En la inauguración sí ha estado el presidente de su patronal, Fernando Fabra, y también el de la Asociación Nacional de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos, Vicente Nomdedeu, en representación del sector y de las 47 empresas asociadas en Ascer que exponen estos días en València.
En total, son más de 500 marcas las que ocupan aproximadamente 80.000 metros cuadrados de la feria valenciana, según destaca la organización. En cuanto a las visitas, más de 900 compradores extranjeros han confirmado su presencia a través de la expedición organizada por Ivace y la propia Feria Valencia.
