Fue el proyecto de aprendizaje de Carlos Mercado, un batería que se había quedado sin poder tocar su instrumento debido a los fuertes dolores que pacedía, el germen para crear un libro que ayudase a más músicos a paliar o prevenir sus lesiones. Jordi Albert, trompetista y experto en neuromotricidad, fue el encargado de impulsar dicho tratamiento que parte de Castellón
CASTELLÓ. Estar lesionado y ser batería, es como ir al ártico en manga corta. Te va a dar algo. Si bien en este último caso con abrigarse basta, el músico que padece dolor solo sentirá alivio cuando deje de tocar. Es por ello, que las lesiones a nivel medio, aunque no afectan a la salud general, sí impiden el ejercicio profesional de la música o incluso del amateur. "Hablamos de un instrumento muy físico, que utiliza todo el cuerpo para coordinarse. Es, incluso, como tener un martillo en cada mano y en cada pie, porque se trata de un movimiento muy repetitivo que se basa en golpear y golpear. Esto hace muy difícil que puedas practicarlo si sientes dolores, y además es frecuente que ocasione fracturas", explica Jordi Albert, músico, experto en neuromotricidad y autor del libro Tocar la batería sin dolor.
Fue en 2015 que, tras finalizar sus estudios en el Conservatorio Superior de Música de Castelló, Carlos Mercado no pudo aguantar más los fuertes dolores que padecía en gran parte de su cuerpo. Es por eso que decidió acudir a la academia del trompetista Jordi Albert para tratarse algunos problemas físicos derivados de sus malas posturas y malos hábitos a la hora de tocar. No obstante, el experto, también de Castellón, no había aplicado hasta entonces su metodología en el ámbito de la percusión. Él, personalmente, es trompetista. Pero, aceptó. A partir de entonces, todos los avances del proceso -en marcha desde 2015 hasta 2017- quedaron registrados en dos diarios: el de aprendiz y el de profesor. Germen, tiempo más tarde, de un mismo libro que, contado en primera persona por parte de Carlos, narra etapa por etapa como el baterista no solo solucionó sus problemas, sino que incluso mejoró su técnica. Un proyecto que vio la luz además gracias al micromecenazgo.
"Carlos tenía muchas dolencias que le incapacitaban por completo tocar. Así, que lo que hicimos fue poco a poco eliminar sus hábitos, porque estos ocasionaban sus microlesiones. Se llegó incluso a poner ortodoncia para corregir sus dientes, porque le provocaba dolores del cuello. De modo que tratamos de enmendar también algunos movimientos de la mandíbula y la presión que hacía en ella", señala el doctor en música por la UPV. Con ello, el libro -que publicará próximamente su segunda edición con otros 200 ejemplares- se presenta como una historia que narra la rehabilitación motriz empleada específicamente con el baterista, pero acaba siendo una guía con estrategias y fundamentos prácticos que pueden servir a más músicos percusionistas para prevenir o paliar sus dolores.
En su caso, Carlos Mercado aprendió a tocar la batería desde cero, a través de técnicas de neuroaprendizaje. La mejora fue tal que incluso se ha terminado formando y especializando en esta enseñanza. En efecto, ambos músicos han creado varias escuelas con sede en Barcelona y Castelló (Calle Santa Cruz de Teijeiro), bajo el nombre de TrainingDrums, para atender a más gente con lesiones, así como para practicar propiamente la música. "Es una forma de compartir con los demás nuestro conocimiento y motivarles a que si hay alguien en esta situación se puede corregir. Existen soluciones", manifiesta Jordi Albert. Así, en la actualidad, solo en la vertiente de baterías, hay activos 14 casos con situaciones similares a las de Mercado y, de igual modo, se trata la lesión con otro tipo de instrumentos.