Fotos: RFET
CASTELLÓ. El duelo España-Francia de la Copa Davis de tenis que se celebra en el pabellón Fuente de San Luis de Valencia comenzó bien, muy bien, y el pase del equipo español a la Final a Ocho del torneo está a tiro. El castellonense Roberto Bautista Agut, jugando a la épica, venció a Arthur Fils por 2-6, 7-5 y 6-3 en 2 horas y 46 minutos de un partido en el que el joven jugador galo, quien a sus 20 años ocupa el puesto número 25 del mundo, exigió mucho al veterano español, de 36 y situado en el puesto 62 del ranking ATP.
De ese modo, el combinado capitaneado por David Ferrer, que en su primer envite de esta fase de grupos se impuso por 3-0 a la República Checa, domina el marcador frente a un adversario que en el estreno había caído por 1-2 contra Australia. Ese resultado otorga al líder de La Armada, el murciano Carlos Alcaraz Garfia, la posibilidad de sellar el pase en su choque frente a Ugo Humbert, el jugador número 1 de los franceses.
El primer duelo de esta confrontación, segundo entre ambos tenistas en el circuito -Fils se impuso a Bautista por 3-6 y 4-6 en el ATP 250 de Montpellier en 2023-, se inició con intercambio de rupturas. El francés le rompió el saque al español en dos ocasiones para el 0-1 y el 1-2 y, aunque el de la Plana, se anotó su primer break para lograr el que entonces era el 1-1, lo cierto es que al de Bondoufle se le veía más suelto. Así, logró por fin asegurar el servicio para tomar el mando. Roberto también se hizo con su siguiente saque pero hasta ahí llegó en el set inicial. Tres juegos seguidos de Arthur, incluyendo su tercer quiebre consumado, le valieron para cerrar la manga a su favor después de 1 hora y 4 minutos.
El segundo parcial lo inició Bautista ganando el servicio pero enseguida su rival se mostró superior y jugó dominando la situación. Tres juegos seguidos se volvió a llevar Fils y se encaminó hacia el triunfo con el 1-3. El de Castellón, un luchador nato, no se iba a dejar ir y se mantuvo firme en la pelea con el 2-3 y el 3-4.
No obstante, el galo continuó arriba y serviría para cerrar su triunfo. Ahí emergió Rober agarrándose a la pista dura de la Fonteta y niveló la contienda. 5-5 y a seguir luchando con las raquetas en la mano. De ahí al 6-5 y más tarde al 7-5 tras 53 minutos en una fase de encuentro en el que el español impuso su temple ante un rival al le tembló claramente la mano.
El encuentro se decidiría en el tercer set y Bautista, tras recibir unos masajes, continuó con la faena. Superó una bola de break en contra y estableció el 1-0 y más tarde el 2-1 con la mayoría de las 9.000 personas concentradas en las gradas dándole su apoyo.
Fils fue entonces el que recibió atención de fisioterapia pero su problema no era sólo muscular. Había perdido la confianza que tenía y Bautista lo debió aprovechar. Se colocó 0-40 en su siguiente turno de resto. Tres bolas de ruptura a esa alturas de partido eran medio triunfo pero las dejó pasar y el marcador que apuntaba a un 3-1 se convirtió en un 2-2.
La tensión iba en aumento en un partido que se detuvo porque al español empezó a sangrarle la nariz pero eso no le impidió seguir con la iniciativa. Con el 4-3 dispuso de otro 0-40 y, aunque desperdició una, logró su propósito con Fils estrellando la bola en la red. Sacaría para ganar. Y no falló. Tras otros 49 minutos rubricó la remontada y gritó de alegría, lo cual contrastó con la imagen de su oponente que rompió la raqueta de pura rabia.
El empate a 102 puntos tras cerca de tres horas de batalla reflejó lo igualado que fue este choque con sus alternativas y que dejó a España a un punto de estar peleando por la Ensaladera a mediados de noviembre en Málaga.