MADRID (EP). El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, considera que alguna de las medidas articuladas en los distintos modos de transporte para garantizar la seguridad, el higiene y la prevención ante el virus "se quedarán para siempre. Muchas de estas medidas ya son para quedarse, las medidas de control de aforos y las relacionadas con la capacidad indudablemente se van a quedar para el futuro, porque dan más seguridad y confianza en los viajes", aseguró Ábalos tras visitar las medidas de seguridad adoptadas en la estación de tren de Madrid Atocha.
"Otras serán coyunturales, y todo ello dependerá de nuestra capacidad para hacer frente al virus que sigue estando entre nosotros", añadió. Durante su intervención tras la visita, indicó que con las medidas de seguridad, higiene y prevención adoptadas tanto en las estaciones como en los trenes se pretende que "la vuelta a la normalidad de la movilidad no afecte a la propagación del virus" y, de esta forma, "se recupere la confianza en el transporte para que la recuperación de esa movilidad contribuya a la recuperación de la economía".
"Porque no se puede recuperar la actividad económica si se sigue restringiendo la movilidad", recordó el ministro en respuesta a quien reclaman más restricción de movimientos. En el caso del tren, el ministro indicó que la oferta diseñada por Renfe para la nueva normalidad, que es un 50% superior a la del estado de alarma pero aún de un tercio respecto a la presta en condiciones normales, está aún por encima de la demanda y se irá ajustando a la evolución de ésta. "Renfe está respondiendo a la demanda, cuantos más viajeros haya, más trenes habrá, aunque siempre con una oferta por encima de la demanda para evitar la masificación", detalló.
Respecto a las medidas de seguridad adoptadas en el ferrocarril, asegura que se complementan las implementadas en las estaciones con las que se llevan a cabo en los trenes. Así, en el caso de Atocha, la mayor estación de tren del país, Adif ha articulado sensores para calcular aforos tanto en las entradas y salidas, como en las salas de viajeros, para evitar aglomeraciones, según detalló tras la visita la presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera. Además, en este recinto se toma la temperatura de los viajeros, "que es contrastada en tres ocasiones", antes de bajar al andén para tomar el tren, y además se comprueba que llevan la obligatoria mascarilla e incluso si la tiene bien colocada.
En el caso de Renfe, su protocolo de seguridad, certificado por Aenor, abarca la limpieza y desinfección de los trenes en vacío, después de cada viaje, pero también en ruta, según relató su presidente, Isaías Táboas. Así, efectivos de mantenimiento supervisan la limpieza y el higiene del tren durante su trayecto para limpiar y desinfectar cuando sea necesario, como puede ser tras la parada y movimiento de viajeros en estaciones intermedias.