VALÈNCIA. El valenciano José Luis Ábalos dejará su cartera al frente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en el marco de la profunda remodelación que este sábado ha anunciado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Será sustituido por por la alcaldesa de Gavà, Raquel Sánchez.
Pero, además, La Sexta ha informado de que Ábalos abandonará, asimismo, la Secretaría de Organización del PSOE, puesto de gran poder interno dentro de la formación socialista. Una circunstancia que, de confirmarse, supondría un abandono de la primera línea por parte del dirigente del PSOE, a falta de conocer si Sánchez le pide que afronte nuevos retos.
Estos cambios tanto en el Gobierno como en la dirección socialista, allanarían a priori el proceso de reelección del actual líder del PSPV y presidente de la Generalitat, Ximo Puig, al frente del partido, que debe celebrarse en noviembre, dado que los afines a Ábalos han sido en los últimos tiempos los que han amagado con presentarle alternativa en el próximo cónclave.
José Luis Ábalos Meco (Torrent, 1959), consiguió en 2018 el político valenciano con más poder en la capital de España al convertirse en el 'número dos' del PSOE y a su vez asumir posteriormente uno de los Ministerios más fuertes del Ejecutivo Central. No obstante, abandona el Ministerio sin haber podido sacar adelante la Ley de Vivienda por la falta de consenso con Unidas Podemos, el partido socio de gobierno, sobre la forma más conveniente de limitar los precios del alquiler.
Hombre de total confianza de Pedro Sánchez, Ábalos conformó el equipo negociador del PSOE que hizo posible el Gobierno de coalición con Unidas Podemos. Cabe recordar que fue el encargado de conducir las negociaciones con los grupos políticos para que prosperara la moción de censura contra Mariano Rajoy.
Durante la pandemia, aprobó medidas dirigidas a afrontar los efectos de la crisis sanitaria y a acelerar la reactivación económica, el conocido 'escudo social', que posteriormente prorrogó en varias ocasiones y que incluía una batería de medias en el ámbito del transporte aéreo, marítimo y de carreteras, pero también en el ámbito de vivienda.
El departamento encabezado por Ábalos ha tenido que lidiar con la paralización casi total y posterior reactivación del transporte público (aeropuertos, trenes, concesiones de líneas de autobuses) durante la pandemia, con medidas para proteger el tejido empresarial, conciliándolo con el respeto a los derechos de los consumidores.
Así, el ya ex ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha dejado el Ministerio sin haber alcanzado un acuerdo con la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, para hacer frente a alguno de los principales problemas del mercado inmobiliario español, como es el acceso de los jóvenes a la vivienda.
El objetivo sigue siendo aprobar una Ley que garantice la función social de la vivienda, que atienda a los más vulnerables y que esté dotada de seguridad jurídica. La última propuesta presentada por Transportes recogía, entre otras cuestiones, que en el caso de nuevos contratos por cambio de inquilino en zonas tensionadas, los alquileres podrán subir como máximo un 10% en comparación con el contrato anterior.
El Ministerio dejó claro que la propuesta cumplía "escrupulosamente" con los acuerdos firmados con el socio de gobierno y tenía como gran objetivo acabar con la subidas abusivas, contener rentas y conseguir bajar alquileres. Por su parte, Belarra aseguró que no había acuerdo con el PSOE y que la "única manera de bajar los precios del alquiler "es con índices de referencia, no con incentivos fiscales".
Han pasado nueve meses desde que ambos socios alcanzaron el acuerdo para impulsar la nueva Ley de Vivienda con regulación del alquiler y la normativa acumula casi cinco meses de retraso sobre el cronograma inicialmente planteado, que era llevar en febrero al Congreso dicha normativa.
Ábalos, que es diplomado en Magisterio y profesor de educación primera en excedencia, lleva desde 2017 siendo secretario de Organización del PSOE y diputado por Valencia en el Congreso desde 2009.
Anteriormente, fue diputado en las cortes valencianas (de 2003 a 2007), director de cooperación internacional de la Generalitat Valenciana (1989-1992), jefe de gabinete del consejero de Trabajo de la Generalitat Valenciana (1988-1991) y jefe de gabinete del delegado de Gobierno en la Comunidad Valenciana (1983-1987).