CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Benicàssim ha conseguido 445.584,79 euros a través de los Fondos Netx Generation que tienen por objetivo la modernización del sistema de recogida selectiva de residuos en el término municipal. Para todo ello, entre las líneas de actuación parcialmente subvencionadas, se llevarán a cabo entre otras actuaciones la adquisición de contenedores ‘inteligentes’ para la recogida de la fracción biorresiduo, contenedores provistos de sistema de identificación de usuario y pesaje, así como también la adquisición de Biotrituradoras transportables o portátiles para la trituración in situ de los restos vegetales generados en las podas.
“Apostar por unas ciudades más verdes, más responsables y sobre todo más saludables es el objetivo que emprendimos en Benicàssim hace tiempo. Las ayudas económicas que aporta los fondos europeos, nos ayudarán a mejorar el sistema de recogida y selección de residuos, para lograr que cada vez podamos reciclar y reutilizar más y genérennos menos residuos”, ha destacado la concejal responsable del área, Elena Llobell.
El proyecto presentado por el consistorio de 1,3 millones de euros contempla también la adquisición de camiones para la recogida separada de biorresiduos. Al proyecto de renovación se le sumará la realización de campañas de información, difusión y sensibilización a la población y empresarios ante uno de los retos medioambientales a los que nos enfrentamos por parte de administraciones, empresas y población en general.
El objetivo del Ayuntamiento es ir dando pasos ante las nuevas exigencias y requisitos de la nueva Ley de residuos para una economía circular, tanto estatal como autonómica y mejorar el servicio actual, mediante la potenciación de la recogida selectiva de fracción orgánica.
Todo ello, alineado con los ODS 11 y 12 referentes a las ciudades y comunidades sostenibles y a la producción y consumo responsable, que establecen la necesidad de una reducción en la generación de los residuos y una adecuada gestión de los mismos y efectuar la transición a una economía circular y baja en carbono para logar en 2030 una reducción en el total de resíduos municipales recogidos.