CASTELLÓ. Benicàssim ha intensificado las labores de limpieza de la trama urbana de los barrancos y en el perímetro de las urbanizaciones de montaña, tanto para prevenir posibles inundaciones como incendios. La alcaldesa, Susana Marqués, ha indicado que “las labores de mantenimiento adecuado y correcto de la trama urbana de los barrancos como del cinturón perimetral del entorno de las urbanizaciones de montaña de Benicàssim son fundamentales para la seguridad y limpieza a la hora de prevenir incendios forestales, así como para evitar mayores daños cuando se producen episodios de fuertes lluvias”. La primera edil ha añadido que “desde el ayuntamiento podemos actuar de forma limitada, por eso coordinar esas labores de limpieza con el resto de administraciones es fundamental para poder tener un correcto mantenimiento, aumentar la seguridad y minimizar los riesgos”.
En cuanto a las labores en barrancos, ya han concluido las actuaciones en el Barranco de Farja a su paso por el tramo urbano. Unos trabajos que se han centrado en el desbroce selectivo de vegetación, refaldado de árboles y eliminación de vegetación seca, así como la eliminación de residuos inertes y otros elementos sueltos con el objetivo de prevenir posibles inundaciones.
Tras ello, ya se ha retomado el plan de acciones de mitigación para la prevención de incendios forestales en las urbanizaciones de montaña. Dos brigadas de mitigación han comenzado las labores de desbroce selectivo de la vegetación en la urbanización Las Palmas y la Parreta.
Como ha explicado la concejala de Medio Ambiente, Elena Llobell, “las labores tienen el objetivo de mitigar el riesgo de incendios, mediante tratamiento de la vegetación en zonas de interfaz urbano–forestal en las urbanizaciones de montaña, zonas que están entre viviendas y rodeados de bosque o zonas forestales y por ello hay que primar la seguridad”. El objetivo de las actuaciones proyectadas es la reducción de la continuidad vertical y horizontal de la vegetación perimetral a núcleos de viviendas, a efectos de crear una franja de menor combustibilidad que reduzca el impacto de un eventual incendio forestal sobre las viviendas o viales de acceso. El desbroce selectivo de la vegetación se realiza primando las especies de especial interés botánico, como puede ser el palmito (Chamaerops humilis) y la actuación también incluye la limpieza de aquellos residuos urbanos que puedan aparecer.