CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Betxí iniciará este año un largo camino para posicionar a la localidad en el ámbito turístico. El Plan Integral recién aprobado fija el monumental Palau como eje para captar visitantes, además de la Romeria y el Transbetxí.
El alcalde electo, Alfred Remolar, asegura que el Plan Integral, que se desarrollará en un horizonte de diez años, debe ser el punto de partida para el despegue turístico de Betxí. “Queremos aprovechar la próxima culminación de las obras de restauración del Palau para posicionarlo porque no hay demasiada oferta turística y queremos darle visibilidad, además de abrir puertas para la captación de subvenciones turísticas procedentes del País Valencià, del Gobierno y de Europa”, remarca.
Solo resta por ejecutar una fase y media del ambicioso proyecto de restauración del Palau, cifrada en algo más de un millón de euros, que empezará a ver la luz a principios de 2020. “Ahora estamos en la fase de redacción del proyecto y ya disponemos del dinero, por lo que el reto es terminar la restauración del Palau dentro de dos años”, remarca Remolar. “Posteriormente decidiremos cómo ponerlo en valor, si en solitario o en colaboración con otros recursos turísticos como el Arenal Sound de Burriana”, añade. El documento técnico aboga por ubicar una sala de interpretación sobre la historia del Palau mediante elementos audiovisuales para atraer visitantes.
Además del Palau, la Romeria y el Transbetxí, el Plan Integral identifica otros 42 recursos turísticos cuya potenciación puede reportar visitantes a la localidad. “La Romeria representa un día muy bonito en un lugar muy singular, donde viene mucha gente de la comarca, por eso queremos que sea declarada Bien de Interés Turístico Autonómico, mientras que el Transbetxí es un acontecimiento mundial que por primera vez hemos promocionado en Fitur este año y que queremos dar más relevancia”, explica el alcalde. Según añade, el Plan Integral sigue abierto a las aportaciones de la sociedad civil de Betxí.
El documento técnico admite una gravísima carencia que dificulta la apertura de la localidad al turismo: Betxí es el único municipio de la Plana Baixa que carece de camas hoteleras. Remolar admite que este obstáculo es muy importante en la lucha por atraer visitantes. “No contamos con una sola cama a pesar de la presencia de industria cerámica en la zona y es un tema que debemos solucionar porque es importante para diversificar la oferta”, apunta.
El Plan Integral propone buscar fórmulas para incentivar la creación de viviendas turísticas. Según el documento, el 10% de las viviendas existentes en Betxí son usadas como segunda residencia y el 26% están vacías, por lo que hay un parque residencial disponible muy alto.
